Pesar en los jugadores rojiblancos tras encajar el segundo gol. Agencia Lof
El Tercer Tiempo

Se acabaron las excusas

Un punto de quince es un balance muy pobre para un equipo que aspira al ascenso directo

Salvador rodriguez moya

Almería

Domingo, 30 de enero 2022

Se encienden las alarmas. La UD Almería volvió a perder y esta vez con Sadiq Umar jugando la segunda parte, tras volver de su periplo ... con la selección de Nigeria en la Copa de África. Un punto de quince es un balance muy pobre para un equipo que aspira al ascenso directo. Los rojiblancos atraviesan su peor momento de la temporada y no es que hayan perdido la forma es que los rivales le han perdido el respeto sobre el césped, se llame Sociedad Deportiva Eibar o Real Oviedo.

Publicidad

El estado de forma de algunos futbolistas es preocupante y ahora más que nunca Rubi tiene la oportunidad de hacer cambios y demostrar la gran plantilla que tiene entre manos para hacer realidad el proyecto con el que inició la presente temporada. El entrenador del conjunto rojiblanco ya avisó la semana pasada que recupera a efectivos y que a partir de ahora son buenas noticias, pero tiene que darse prisa en revertir la situación porque si no es así algunos van a apuntar al banquillo, es la historia de siempre, y ya empieza el run run cuando llegan las derrotas.

No soy original cuando digo que la Segunda División es una categoría muy «perra» y la Unión Deportiva Almería lo está viviendo en primera persona. Cualquiera te saca los colores y si no corres más que el rival la calidad no te da para ganar los partidos.

Muchos aficionados se sienten desesperanzados, pero un triunfo lo cambia todo, quizá sea la medicina que necesita el equipo. Y es que las opciones están intactas, queda un mundo y ahora vamos a intentar ver el vaso medio lleno.

Publicidad

Es mejor entrar en crisis a mitad de temporada que en el tramo definitivo como años anteriores; hay tiempo para reaccionar y de hecho en plena crisis de resultados el equipo sigue siendo uno de los favoritos al ascenso, muy buen situado. Sadiq Umar si quiere jugar en un grande o en el Almería en Primera División tiene que tirar del carro ahora que la Copa de África ya es historia; las dos plazas del ascenso directo a la máxima categoría están intactas porque, a diferencia del año pasado, RCD Espanyol y RCD Mallorca estaban un peldaño por encima y el resto tenían que pelear por la tercera plaza que se llevó finalmente el Rayo Vallecano conquistándola en el playoff de ascenso. En cambio este año, ni Eibar ni Valladolid tienen ese poderío y hay tres plazas en juego.

Me ha tocado hacer el artículo más difícil de la temporada, acostumbrado a tirar de epítetos positivos del equipo y del entrenador, pero es lo que hay. El Almería tiene que subir sí o sí y hay tiempo para arreglarlo. Aquí no se improvisa, hay que trabajar, si hay jugadores que se tiran del barco hay que poner a otros y si el capitán del barco se atasca habrá que ayudarle para que no pierda el horizonte. Las bajas ya no son excusas, ni la ausencia de tu futbolista franquicia, el mercado de invierno está para subsanar deficiencias y los rojiblancos lo han pasado casi de puntillas. La suerte está echada.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad