Sierra Nevada mira al futuro con la apertura del telecabina Al Ándalus

Los operarios colocaron las últimas piezas de la superficie entre pitidos de las máquinas y la puesta en marcha de los controles de acceso, que empezaron a parpadear como muestra de su correcto funcionamiento. Mientras tanto, el sol brillaba sobre el olor a nuevo y el cristal impoluto de las cabinas que ya hicieron sus primeros trayectos de prueba y que desde hoy acogen a los usuarios con el objetivo de convertirse en un atractivo único e independiente más de la estación de esquí. Su principal función, conectar Prado Llano con Borreguiles y hacerlo con las mejores vistas posibles para todo aquel que acude al espacio en busca de otros muchos privilegios, como actividades de ocio o paisajes envidiables.

Esta transformación del telecabina va de la mano de una mayor «eficiencia energética» y supone una auténtica revolución, ya que el espacio gana en comodidad y rapidez para sus usuarios. El nuevo remonte pretende ser todo un icono en la estación que va a hacer que el espacio se incorpore al siglo XXI en cuanto al sistema de transportes por ser de última generación.

Después de 33 años de servicio, Al Ándalus sustituye desde este viernes a la antigua instalación para renovar el trayecto que conecta la urbanización de alojamiento de Prado Llano con Borreguiles, centro neurálgico del dominio esquiable de Sierra Nevada y uno de los más útiles y usados del enclave.

A este se le unirán también otros remontes que entrarán en servicio en los próximos meses en la estación y entre los que se encuentra una alfombra en el área de iniciación de borreguiles

Comodidad y rapidez. Esas son las claves de la nueva instalación que ha necesitado también una reforma y ampliación de los puntos de acceso y que le ha dado una nueva imagen al recinto.

Las cabinas dieron sus primeras vueltas la tarde de este jueves aunque sin estar abiertas al público aún y lo hicieron con algunos de los trabajadores que las utilizaron para llegar hasta Borreguiles. «Son una maravilla por el espacio que tienen y por las vistas que ofrece», señaló uno de ellos al mismo tiempo que otro destacó la rapidez con la que se llega de un lugar a otro. Con una capacidad para 10 personas sentadas, cuentan, por primera vez, con un espacio destinado a los esquís de los usuarios que recorrerán en solo 8,5 minutos los 2,5 kilómetros que separan ambas zonas.

Las obras, cofinanciadas con fondos FEDER, han contado con una inversión de más de 16,7 millones de euros y ha sido la mayor destinada a un medio mecánico de Sierra Nevada para estar a la vanguardia en el sistema.