El Real Jaén merece más en Copa del Rey

Igualdad, con un duelo tremendamente equilibrado, en su inicio. El primer acercamiento lo firmó Miguel Marí, sin puntería en su intento de perforar la portería contraria. Tras una acción por banda derecha el esférico se perdió alto.

En el minuto 10 Juanma Porro vio la primera cartulina amarilla del encuentro. El guión se mostraba escaso de continuidad en el juego, con múltiples interrupciones por faltas tácticas.

La principal, y más importante, batalla del conjunto blanco pasa por abandonar la quinta categoría del fútbol nacional. Por su mala-malísima salud de hierro. Pero por el camino a nadie le amarga un dulce con aroma a Primera División. Yahí puso todo su empeño.

En el bloque dirigido por Fernando Estévez, natural de Granada, hubo rotaciones. Sí estuvo Dario Dumic en el centro de la zaga debido a que el central bosnio se perderá el próximo duelo liguero por sanción. También peloteros con clase como Florin Andone.

Superado el primer cuarto de hora, los de la capital jienense estaban logrando incomodar a su rival. Y consiguió su objetivo: golpeó primero. Tras una gran acción colectiva, iniciada por Adri Paz, que culminó Brian con Mario Martos como protagonista destilando una enorme técnica individual por sus botas. Primera llegada y gol en el minuto 24.

Cinco veces se habían enfrentado en tierras jienenses ambas escuadras, sin que el Eldense hubiera conseguido puntuar en ninguna visita. Además, se midieron en Copa del Rey en la temporada 1974/75, un duelo en el que salió victorioso el equipo jienense. Eliminatoria a doble partido. En la ida, celebrada el 4 de diciembre de 1974, el Real Jaén se impuso por 4-0 y en la vuelta, que se jugaría dos semanas después, el Eldense se impuso por un insuficiente 2-0 por lo que el conjunto blanco se clasificó para la tercera ronda. Los precedentes eran optimistas.

A la media hora de juego, el joven Jouness Lachhab tuvo que abandonar por lesión, y entre lágrimas, el terreno de juego.

Javi Sánchez sacó una mano salvadora ante Florin Andone. Evitó el empate en el minuto 35 en un disparo con pierna izquierda del delantero e internacional rumano.

El CD Eldense no encontraba la fórmula para hacer daño a su rival ante un Real Jaén que parecía transformado respecto a su versión doméstica. Presión asfixiante efectiva, sin abusar del juego directo y contundente atrás.

En una acción que tuvo como origen a Cancelo, Mario Martos no pudo culminar por la rápida y eficaz reacción de la defensa visitante. Y el meta Aceves salvó el segundo, tras una acción plena de calidad, ante Adri. Gran partido de los blancos que llegaron a la recta final del primer round con 'fútbol champagne'. Degustación futbolística para una sufrida parroquia local que supo agradecerlo con un cálido reconocimiento.

Pero los errores se pagan. En el último suspiro, en tiempo de descuento, Miguel Marí remató completamente solo en el segundo palo, con la testa, tras un centro lateral de Joel Jorquera.

Se reanudó el encuentro con el Eldense intentando, sin éxito, llevar la iniciativa.

La eliminatoria entró en terreno de sustituciones. Ambos técnicos apostaron por oxigenar sus onces. Fajardo dio entrada a Joseliyo y Fernando Estévez colocó a dos pesos pesados como Ortuño y el jienense Carlos Hernández.

Mario Martos regaló una nueva alegría a la afición local. Un centro medido de Joseliyo que el jienense alojó con precisión al fondo de la red con un remate de cabeza. 2-1, en el minuto 63.

El club alicantino disfrutó de ocasiones claras de gol. Iván Chapela probó los reflejos del meta local y Ortuño le ganó la mano a Javi Sánchez pero su disparo se perdió rozando el palo. Diez minutos para llegar al noventa.

En el 85, Ortuño, de falta directa, puso en muchos aprietos a Javi Sánchez.

La ilusión aguantó hasta el minuto 87. Un cañonazo lejano del lateral azulgrana, Derick Poloni, igualó la eliminatoria. Ycomo en el Real Jaén, en los últimos años, si algo puede ir mal empeorará, en el minuto 90 el colegiado señaló un dudoso penalti que transformó Ortuño (3-2).

El colegiado murciano, triste protagonista del duelo, decretó siete minutos de prolongación. Tiempo en el que Pablo de Castro vio la segunda amarilla y fue expulsado.