El agua que brota de las ollas naturales en Granada
Fuencaliente, en Huéscar, es una zona de acceso es libre y gratuito donde disfrutar de un día en familia en una piscina natural que mantiene la misma temperatura todo el año
Jueves, 20 de octubre 2022, 01:00
Acaba el verano pero el calor no parece querer marcharse del todo. Los 30 grados siguen siendo rondados en muchas zonas de la provincia de ... Granada. Pese a todo, el otoño avanza y en busca de algo más de frescor y para ello un buen plan es visitar la zona norte de la provincia. En su límite, entre la propia provincia de Granada, Jaén y Albacete, se encuentra Huéscar, un lugar ideal para degustar su cocina tradicional, entre la que destaca el cordero segureño, pero también para conocer algunos de sus rincones.
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Allí se encuentra, por ejemplo, el museo José de Huéscar y Garvi, que recoge la obra del dibujante de cómic nacido en España y emigrado a Francia que, antes de moriri, quiso donar toda su obra al municipio que le da su apellido, a pesar de no haber nacido allí. El museo se encuentra en uno de los edificios del siglo XVI con más historia de Huéscar, el Pósito, donde se expone de forma permanente su obra.
Otro de los atractivos oscenses es la Torre del Homenaje, una estructura defensiva perteneciente a la antigua fortaleza musulmana considerado el gran balcón-mirador de Huéscar, desde el cual se puede entender el sistema defensivo de la antigua ciudad. Se trata de una estructura cuadrangular hecha en tapial cuyas esquinas se encuentran reforzadas para hacerse más resistentes ante un ataque.
Cordero segureño
El centro de interpretación del cordero segureño, la iglesia de Santa María o su teatro son otros de los focos en los que el visitante se pueden centrar en su visita al municipio, pero en las afueras, a solo dos kilómetros del núcleo urbano, se encuentra un enclave natural de principal atractivo, Fuencaliente.
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Su crecanía con el núcleo urbano permite acceder al recinto tanto a pie como en coche. Si se decanta por esta segunda opción, hay una zona de aparcamientos. Su acceso es libre y gratuito, así como también el uso de la zona recreativa, que cuenta con pista de tenis, baloncesto y jardines para que los más pequeños puedan disfrutar de la visita. Hay, además, servicio de restaurante. Se trata de un lugar perfecto para pasar un día de verano en familia disfrutando de un baño. Pero también cuenta con una atractivo especial durante todo el año.
El agua brota de las ollas naturales que hay en el fondo. Son estas ollas las que dan nombre al manantial, ya que se trata de aguas termales. Este lugar ha tenido cierta importancia en la comarca, sobre todo en época moderna, pues junto a este se ubicaron molinos y lavadero de lana, en los cuales el agua se hacía muy necesaria.
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Su temperatura se mantiene durante todo el año sobre los 18º, de modo que sirve para refrescarse durante el verano y sofocar el calor, pero también durante este caluroso otoño puede servir a modo de excusa para conocer una parte de la zona norte de la provincia de Granada.
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