El ministro de Cultura, en el taller de lectura y escritura La Silla de Anea, en Martos. ideal

Un ministro en silla de anea

¡Llegó Uribes! Con menos de lo esperado y más que si no hubiera venido. Y vino intenso, subiendo por los andamios de la Catedral y leyendo al atardecer en mitad de un olivar.

Domingo, 9 de mayo 2021, 13:02

Vino al fin el ministro de Cultura y Deporte, a los dieciséis meses de llegar al cargo, con una pandemia de por medio. Y ... Rodríguez Uribes, como si quisiera compensarlo, llenó el día de cultura y deporte. Empezó en el Ayuntamiento devolviéndole al alcalde la visita de días antes, siguió por la Catedral con su ilustrado deán para admirar las bóvedas vaídas de Vandelvira y su sala capitular, y para poner la habitual cara de 'cómo no conocía esto'. Y ya reconfortado subir los estrechos andamios hasta el tejado, donde su ministerio invierte tres millones de euros para acabar de una vez con las filtraciones y con el limosneo presupuestario de dos décadas, 'gratias aeternam' a José Guirao, su antecesor, uno de los ministros que más hizo por Jaén en menos tiempo.

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Continuó Uribes por el Museo Ibero, paseando sus vacíos y saludando al Guerrero de la doble armadura y al Lobo del Pajarillo, en una exposición que era por unos meses y va ya por unos años. Y atendió a la prensa y mantuvo una reunión de trabajo, y por la tarde inauguró en Martos la rehabilitación de la Torre Almedina y acabó el ministro valenciano leyendo 'Los pazos de Ulloa' gallegos entre olivos en flor, retrepado en una silla de anea, con su doble mascarilla pero ya sin la corbata azul decorada con 'stilettos' rojos muy sexis.

Un ministro a lo Tenorio, 'yo a las cabañas bajé/ yo a los palacios subí', de cuya esperada visita se esperaba más, algún anuncio nuevo, pues su propuesta de hacer del Museo Ibero un centro de investigación suena en parte a 'déjà vu', ya que existe el Instituto de Arqueología Ibérica y la Universidad reafirmó su colaboración. Pero sobre todo se esperaba más concreción para que forme parte de la red nacional de museos, una oportunidad única que el ministro garantizó, aunque será al final de un proceso cuyo principal hito es la deseada colección permanente para llenar el museo y que éste sea un museo de verdad. La buena disposición de la consejera Patricia del Pozo y la reunión de ambas partes para el día 20 abonan la esperanza, si bien esa colección llevará varios años verla, por mucha prisa que se den (adaptación del proyecto museológico, licitación del museográfico, redacción de proyecto técnico, ejecución), y para entonces lo mismo ya tenemos un nuevo ministro, o dos. ¡Qué viva México, pero no tan lejos!

Porque se desconoce por qué lo de nacional es al final del trayecto y no al principio. El ministro dijo que la colección permanente es «condición 'sine qua non'», pero no aclaró por qué, que lo mismo lo hay. Con todo, lo más positivo es que existe una hoja de ruta y sintonía entre administraciones, para hacer realidad «el gran sueño de Pilar Palazón», como recordaron, y también de no pocos jienenses, que quieren tener un museo completo, el único ibero de estas dimensiones en el mundo, y un museo que sería el único nacional en Andalucía. Una oportunidad histórica que en otras latitudes quisieran y, lógicamente, están al acecho. Por lo que, boquerón que se duerme, museo que se lo lleva la corriente. ¡Qué bien nos vendría ahora Pilar 'palizón', como la llamaba cariñosamente Alfonso Sánchez! Y ahora que los ministros parecen haber encontrado el hilo de Ariadna que les trae a Jaén sin que haya elecciones, es momento de darles la 'paliza' y que sus visitas no sean solo eso, ni acaben como el conocido fragmento de Don Juan:

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'Yo a las cabañas bajé,

yo a los palacios subí,

yo los claustros escalé,

y en todas partes dejé

memoria amarga de mí'.

Susana se hace 'un ayuso'

El líder socialista jaenero salió de la cuarentena como de chiqueros. Entre visitas ministeriales aquí y allá, Reyes lleva semanas al abordaje. Cogió en enero la bandera del adelanto de las primarias (eufemismo de sustituir a Susana Díaz por Juan Espadas) y ahora que se han adelantado vive sanjuanista. Pero 'a sarna con pracer non pica'. Hasta el día de San Antonio le espera un mes de escopeta y perro. Al margen de los dos candidatos, es el que más se juega. Confían en ganar, pero si gana Susana, adiós muy buenas.

Desde fuera la batalla se ve igualada. Susana, que en cuestiones internas sabe latín, ha olido la sangre de Sánchez tras la estocada madrileña y ha recuperado de repente la locuacidad, haciéndose un 'ayuser': criticas a la subida de impuestos, apelación a votar en libertad y que las bases decidan (esto último, muy 'sanchista', como bien sabe ella). O sea, que venderá cara la piel de su última, o no, batalla.

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