El acuerdo de coalición PSOE-Unidas Podemos establece que se frenarán «las subidas abusivas del alquiler», para lo cual «se impulsarán las medias normativas necesarias ... para poner techo» a tales alzas. La inconcreción del acuerdo ofrece diversas soluciones al problema de limitar los precios de los alquileres. En concreto, el PSOE, por boca de Ábalos, que tiene las competencias estatales en la materia, no es partidario de limitar los precios sino de incentivar fiscalmente a los propietarios en áreas tensionadas –hasta en 90% si bajan lo suficiente el alquiler con relación al Sistema de Precios de Referencia– para incrementar la oferta. También los socialistas proponen subir el IBI a las viviendas vacías. Unidas Podemos, en cambio, critica la fórmula por «antisocial» e insiste en imponer topes de rentas, mediante un sistema parecido al Mietpreisbremse, o freno a los alquileres, establecido en Alemania. Lo deseable es que se consiga una fórmula mixta de consenso que ayude a materializar el derecho constitucional a una vivienda digna, y ello ha de lograrse sin olvidar que la ley de la oferta y la demanda termina siempre imponiendo su imperio, ni que la mejor manera de que haya más oferta y más barata es incrementando significativamente la construcción de viviendas sociales.
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