Las críticas de Puente contra la gestión de Mañueco por los incendios abre otra guerra Gobierno-PP

Los populares arremetieron contra «el ingenio de saldo» de Puente, al que reclaman «sentido de Estado» ante la ola de incendios desatada en todo el país, después de que el día anterior, en su retahíla de tuits, llegase a bromear con que «en Castilla y León la cosa está calentita», mensaje que borró de su perfil horas después. «Si un presidente autonómico de mi partido estuviera de farra mientras el pueblo se ahoga, o mientras su territorio se quema, sería cesado de manera automática», escribió el titular de Transportes comparando la ausencia de Mañueco con la protagonizada por el mandatario valenciano, Carlos Mazón, durante la dana.

El propio Feijóo salió al rescate de su dirigente teritorial y replicó que si un ministro de su Gobierno «bromeara con el sufrimiento de un pueblo asediado por las llamas sería cesado de manera inmediata». El jefe de la oposición aprovechó la nueva salida de tono de Puente –el fue quién prendió la mecha hace unas semanas por el cúrrículum de la ya ex dirigente del PP, Noelia Núñez –, para arremeter contra Pedro Sánchez y exigir al presidente que pida a su equipo «sensibilidad y respeto ante el dolor de los españoles» ya que no les pide «eficacia» ni «honradez».

Para los conservadores, uno de los problemas de España, que ha vuelto a ser excluida, como denunciaron, de la cumbre convocada por el canciller alemán Friederich Merz para debatir sobre el futuro de Ucrania, es que «no tiene al frente un Ejecutivo, sino una banda de tuiteros».

Mientras las críticas contra Fernández Mañueco se agudizan, en Génova excusan a su barón asegurando que «ha estado informado y al pie del cañón en todo momento» e insisten en que la situación «ha estado controlada desde el principio». Podemos reclamó este martes la dimisión del presidente de Castilla y León y del consejero de Medio Ambiente, Luis González Gago, por su «incompetencia y pasividad» ante el fuego que ha devorado Las Médulas, Patrominio de la Humanidad.

La formación que dirige Ione Belarra reprocha a Quiñones su presencia en «una comilona en Asturias» mientras el fuego consumía el paraje natural y la comarca del Bierzo, además de la provincia de Zamora. «Estuvo al frente de los trabajos de extinción y salvamento», alegó, por su parte, la vicesecretaria de Coordinación Sectorial de los populares, Alma Ezcurra.

La dirigente conservadora reclamó ayer a todos los representantes políticos más «empatía» y «respeto» ante la situación que vive España asolada por las llamas, que se cobraron a su primera víctima mortal en la localidad madrileña de Tres Cantos, porque «los momentos que vivimos no son momentos de partidismos o de ideologías, son de humanidad». Ezcurra centró sus críticas en el ministro Puente y en «toda esta gallardía que está demostrando», en referencia a sus incendiarios tuits, y que, en su opinión, debería mostrar ante los ciudadanos de la tierra en la que ha pasado tantos años y «a lo mejor así descubriría que ese ingenio de saldo no sirve para nada para aliviar la angustia de unos vecinos que lo están perdiendo todo».

En una intervención ante los periodistas a las puertas de la sede nacional la número tres del PP avanzó la ofensiva lanzada desde el grupo parlamentario popular contra los «mensajes de odio» del ministro de Transportes. Los de Feijóo han registrado una batería de preguntas en el Congreso dirigidas al Ejecutivo para saber quién los está controlando. También para conocer «quién ordenó a Puente» que retirara alguno de ellos o quién está al tanto «de lo que pasa con el Gobierno mientras Sánchez está recluido en Lanzarote».

En total, 14 preguntas entre las que se incluye conocer cuántos asesores del Ministerio de Transportes se dedican a gestionar las redes sociales del ministro y «cuántos a la supervisión de las líneas ferroviarias». También si el Gobierno va a incluir los post de Puente en el grupo de seguimiento para perseguir mensajes de odio que anunció la semana pasada su compañera en el Consejo de Ministros, Elma Saiz, a raíz de la moción del PP y Vox para prohibir la celebración de ritos muslmanes en las instalaciones deportivas de la localidad murciana.

Fue precisamente la ministra de Inclusión, quien este masrtes se descolgó de la actitud de Puente. «Mientras España está ardiendo, a mí me van a encontrar siempre en la colaboración y no en la confrontación. Es momento –afirmó– de estar unidos».