«Las oposiciones de la UGR han sido muy difíciles, sólo el examen tenía 37 páginas»

«No es normal. No hemos tenido tiempo material para contestar las preguntas. Ha sido un examen muy difícil con 37 páginas para contestar en solo hora y media. Los enunciados eran muy largos y las contestaciones muy enrevesadas. Es frustrante», comentaba ayer en la faculta de Filosofía y Letras María Antonia, quien se ha presentado ya a tres procesos selectivos distintos en la Universidad de Granada.

No hubo incidencias destacables y todo estaba perfectamente organizado, salvo cuestiones muy puntuales. «Han repetido una pregunta dos veces y creo que puede ser motivo para impugnarlas. Se han pasado tres pueblos. Eran unas oposiciones propias para notario o para jueces no para simples administrativos de la Universidad de Granada», comenta Carlos, quien ha gastado año y medio de su vida en preparar estos ejercicios con el consiguiente gasto de academia durante este periodo. «Son muchas horas de estudio para que ahora te pongan un examen así, es una vergüenza», se queja.

La desazón de la mayor parte de los opositores era la cara más común de este primer ejercicio donde todos comparten un sueño: lograr una plaza para trabajar en la UGR.

Antes del examen, las formas se veían de otra forma. «Nos han mantenido con mucha incertidumbre hasta el final por culpa de la impugnación sin sentido que han hecho 36 opositores sólo porque la UGR puntúa algo más la experiencia si has trabajado en esta universidad que en cualquier otra. Los que llevamos años trabajando aquí y presentándonos lo vemos lógico. Bueno, ahora, lo que tengo es muchos nervios», advertía María José antes de entrar al examen, una interina que le ha tocado examinarse en la facultad de Económicas.

«Yo llevo un año preparando estas oposiciones. Estudié Filosofía pero no encuentro trabajo en nada por eso he querido probar suerte. Es mi primera vez», explicó Aurora, otra aspirante que sueña con obtener una de esas 77 plazas convocadas.

Los nervios eran palpables durante los llamamientos de los opositores a las aulas donde se examinaron. Dispusieron de noventa minutos para efectuar sus exámenes a partir de las 11.15 horas y quien tenga suerte repetirá en un segundo ejercicio de informática en las próximas semanas. Para ello necesitan sacar un cinco en el primer examen.

Las oposiciones llenaron el Campus de Cartuja de vehículos y de gente que esperaba a familiares o amigos a que salieran de este primer examen. Detrás de la mayoría de ellos, hay muchas horas de estudio y de sacrificio. El sueño es obtener un trabajo de auxiliar en la Universidad de Granada.

De momento, se desconoce cuándo será el segundo examen y cuándo saldrán las notas de este primer ejercicio, aunque ayer corrió el rumor de que los resultados de esta primera prueba podrían colgarse entre hoy y el miércoles en la web de la Universidad de Granada. Qué Dios reparta suerte, hará falta.