El edificio UGR-Dones de Escúzar estará listo a fin de mes

El UGR-Dones está vinculado directamente al acelerador de partículas Ifmif-Dones, como se ha dicho, y en el que se llevará a cabo I+D de excelencia de apoyo a esta infraestructura, así como investigación e innovación en áreas del conocimiento relevantes para las grandes instalaciones científicas. La instalación está proyectada por tanto con la intención de poder reunir grupos de investigación de diferentes campos: física, química, medicina, ciencias de los materiales o informática, que desarrollarán proyectos para favorecer la generación de conocimiento y optimizar las posibilidades de uso del Ifmif-Dones, que se levantará en Escúzar, cerca del UGR-Dones, con el fin de probar, validar y calificar los materiales que se utilizarán en futuras plantas de energía de fusión.

El UGR-Dones debió terminarse en diciembre porque se ha construido con fondos europeos y se debían justificar en ese tiempo. Finalmente la Universidad consiguió una demora de la Junta para que sea en los próximos días. La primera piedra –acto oficial- se puso en marzo de 2023, pero las intervenciones se habían iniciado antes. La Consejería de Universidad está apoyando la construcción con 14,46 millones de euros, de los que 7,9 millones están destinados a la construcción, mientras que los 6,56 restantes se emplearán para la adquisición del equipamiento científico y otras prestaciones.

Sobre el traslado, que será progresivo y se irán habilitando espacios poco a poco, José Aguilar avanza que el primer grupo en instalarse en Escúzar estará compuesto por treinta y cinco personas del equipo Ifmif-Dones. El plazo que marcan primero es antes de verano, pero esa fecha no está cerrada dado que hay que tramitar todos los permisos para usar el edificio.

El inmueble, compuesto por diferentes módulos, acogerá, también, diferentes prototipos relacionados con el Ifmif-Dones. Los primeros que se llevarán y con los que investigarán son el MuVacAS (Multipurpose Vacuum Accident Scenarios) y el Stumm (STart-Up Monitoring Module), según concretó Aguilar.

Cuando el haz de deuterones del acelerador incide sobre el blanco de litio se producirá una gran cantidad de neutrones, una nube de partículas que son el objeto de deseo y que serán las que se utilicen para chequear y validar el comportamiento de determinados materiales en ese ambiente, dentro de esa «nube de neutrones» que los científicos de Ifmif-Dones van a tener dentro de la instalación. Pero antes de que comiencen las compañas científicas en el acelerador es esencial que se conozca y caracterice adecuadamente cómo es y cómo se comporta esa nube de partículas. Para ello los científicos e ingenieros tienen previsto construir el denominado Stumm, que incluirá sensores y detectores muy sofisticados para medir temperatura, flujos de neutrones térmicos, flujo de neutrones rápidos, radiación gamma y calentamiento nuclear.

El prototipo Stumm será el banco de pruebas que permitirá caracterizar y aumentar el conocimiento acerca de los diversos tipos de sensores y detectores que nutrirán el módulo definitivo que habrá en Ifmif-Dones. Además, con el prototipo se intentará averiguar si alguno de esos detectores puede servir de salvaguarda del acelerador en caso de desvío súbito y accidental del haz incidente.

Por otra parte, el objetivo principal de la instalación experimental MuVacAS es construir, según explicaron los ingenieros un prototipo que recree la cámara de vacío de los últimos 30 metros de la línea de transporte del haz del acelerador de partículas. Es, según lo describen, como un túnel en el que viaja un tren compuesto por vagones, con la diferencia de que el tren es un haz de partículas atómicas llamadas deuterones. Dentro de ese túnel por el que viajan las partículas se debe generar lo que los científicos llaman un alto vacío. «Para que nos hagamos una idea de la magnitud, esa presión en el interior de esa línea de transporte es ¡0,00000000001 veces la presión atmosférica! Eso significa que dentro no debe haber casi nada, ni oxígeno, ni nitrógeno, ni el resto de los componentes que podríamos encontrar en el aire que nos rodea», describen.

El MuVacAS será un experimento en el que se construirán treinta metros de tubos en varios diámetros, en los que se generará un vacío similar al del acelerador en servicio, y en el que los científicos e ingenieros podrán simular distintos escenarios de riesgo que, «aunque bastante poco probables, no son imposibles; como la posible entrada de agua o gases que puedan alterar esas condiciones de trabajo».

Tras estos prototipos llegarán otros y también más personal. La mudanza como se ha dicho será progresiva para ir dando forma al ecosistema de investigación y trabajo que rodeará a la infraestructura científica Ifmif-Dones, que estará a unos escasos metros el UGR-Dones.