¿Subirá el precio del aceite en origen por la reducción de cosecha?
El olivar tradicional en la provincia afronta un año difícil con menos 'oro líquido' y mal pagado, por lo que el sector insiste en la puesta en marcha de medidas ya para revertir la crisis
Es la gran incógnita sobre la mesa y la más difícil de responder. Toneladas arriba o abajo (en una horquilla de cincuenta o cien mil, ... lo que en el global no es decisivo) todos los representantes del sector coincidían ayer en que la cifra de producción rondará lo anunciado por el aforo, por lo que la duda ahora es si, la menor producción en España, la despensa del mundo y principal productor mundial, servirá para tirar de los precios hacia arriba, ahora mismo por los suelos. Y ahí, las asociaciones agrarias y Cooperativas-Agroalimentarias coincidieron en que, por sí solo, sin que se activen mecanismos como el almacenamiento privado (ya anunciado, el jueves se someterá a aprobación el borrador que habla de 50.000 toneladas para arriba retiradas del mercado para elevar los precios) no subirán. No bastará, consideran, sólo con la campaña a la baja debido al elevado enlace de la pasada (lo que quedó sin vender) y a que la producción en terceros países como Túnez, Portugal o Italia crecerá de forma notable. El mercado, en cualquier caso, actúa de un modo difícilmente predecible. En la última campaña Jaén y por extensión España tenían la sartén por el mango y la fuerza al disponer de la mayor parte de la producción y los precios cayeron.
Las organizaciones agrarias, Upa, Asaja y Coag coinciden en que el olivar tradicional se enfrenta a una complicada campaña. El secretario general de la Upa Jaén, Cristóbal Cano, aseguró que más allá de las cifras ofrecidas en el aforo, «partimos de una situación muy complicada, una situación con los precios en origen por los suelos, a lo cual se le añade una cosecha escasa, sobre todo en la provincia de Jaén, con la repercusión que va a tener en el empleo».
En este sentido, ha puesto «el foco en los más de 2,5 millones de jornales que con respecto a la pasada cosecha van a disminuir en Andalucía». «Esperamos que el anuncio de caída de producción, especialmente en las zonas donde se produce aceite de mayor calidad y estabilidad, tenga una repercusión positiva en el alza de los precios», subrayó.
A tenor del aforo, añadió Cano, «nos reafirmamos en nuestra consideración de que no existen razones que justifiquen la importante pérdida de riqueza que sufrimos los olivareros, en especial el olivar tradicional; y en la exigencia a los gobiernos para que apliquen ya las medidas que hay encima de la mesa que permitan un equilibrio del precio, porque se está demostrando, claro ejemplo es lo ocurrido en la campaña 2018/2019, que la ley de la oferta y la demanda no funciona».
El gerente y portavoz de Asaja Jaén, Luis Carlos Valero, apuntó a que debido a la extensión del cultivo por todo el territorio nacional la cifra de 1,2 millones de toneladas en España será «habitual en las próximas campañas» y consideró que con el alto enlace de cosecha va a haber que potenciar al máximo «todas las medidas que estamos pidiendo para sujetar el mercado». «La primera ya está en marcha que es el almacenamiento privado», aseguró, aunque incidió en que es más importante «la promoción para vender mucho más aceite y conseguir que producción y consumo se queden equilibrados, y a partir de ese equilibrio tener precio». Como medida a muy largo plazo hablar de que el olivar tradicional no es competitivo respecto al superintensivo que está aumentando en todo el mundo y tiene difícil adaptación.
El secretario general de COAG Jaén, Juan Luis Ávila, valoró que «cincuenta o cien mil toneladas arriba o abajo estamos viendo que a nivel mundial supone poco», ya que «la cosecha a nivel mundial va a ser inferior a la anterior campaña» y «creo que estamos en el mismo escenario». Coag Andalucía pide además a Bruselas que ponga medidas para que los países productores realicen un aforo de aceite «real y transparente», ya que los datos aportados «son totalmente absurdos», e insiste en la puesta en marcha de medidas estructurales, además del almacenamiento privado que está a punto de ser aprobado por Bruselas «y que llega tarde».
Por ello consideró que «lo lógico debería ser una recuperación de los precios, lo que va a suceder si ponemos medidas como las que estamos trabajando, si no ponemos esas medidas está claro que el pulso que nos están echando por parte de la industria y de la distribución al final se están llevando el ascua a su sardina».
Finalmente, Cristóbal Gallego, de Cooperativas Agroalimentarias, recalcó que se trata de una cosecha esperada, no tanto en Jaén donde la esperaban aún menor, y a la que habrá que sumar el enlace de aceite de la anterior campaña, por eso insistió en la autorregulación. Respecto al almacenamiento privado, ha dicho que siempre ha sido, como los aranceles, la gota que ha colmado el vaso, y que se reunirán en los próximos días para ver cómo lo pueden autogestionar.
El Grupo Interóleo advirtió de que España pierde 600.000 toneladas de aceite con respecto a la pasada campaña, cantidad que no se compensará con el incremento en los otros países productores.
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