«No sabemos la de euros que se nos van por no tener optimizada la factura eléctrica»

«Desde 2017 el 90% de los ayuntamientos de la provincia ha solicitado participar en proyectos para mejorar su eficiencia energética, también los centros educativos», señaló Pedro Bruno, diputado provincial de Agricultura, Ganadería, Medio Ambiente y Cambio Climático de la Diputación de Jaén, que puso de relieve los objetivos de la administración para 2030. Para ello se ha hecho un pacto con los alcaldes pensando en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) propuestos por Naciones Unidas, con la meta de lograr un 40% de reducción de CO2, un 27% de aumento de la eficiencia energética y un 27% de energía procedente de fuentes renovables.

En este tiempo la Diputación ha realizado más de 320 asistencias a los ayuntamientos para el ahorro energético y de su factura eléctrica, con más de 10 millones de euros de inversión para la reducción de la factura. «El consumidor cada vez mira la calidad de una forma más amplia que incluye el respeto al medio ambiente», expone Bruno, que considera clave «aprovechar el potencial de la provincia, los 66 millones de olivos, los cuatro parques naturales, el segundo más grande de Europa, lo que nos hace únicos». Entre los proyectos de la Administración provincial destacan de «movilidad, con un punto de recarga de vehículos eléctricos», en ayuntamientos que han reducido de forma considerable su factura eléctrica revisando su potencia contratada y condiciones o los 40.000 puntos de luz en toda la provincia en los que se trabaja con un ahorro energético de más del 50%. Como pilar clave apunta a la «educación. A los jóvenes y más pequeños es más fácil concienciarlos. En esta línea estamos trabajando, en colegios, etc».

Junto a él participaron Julio Terrados, coordinador del Máster de Energías Renovables de la Universidad de Jaén, y Antonio Ruano, director general de Intelec Ingeniería Energética.

No sólo en las grandes infraestructuras, administraciones y empresas se ha hecho hincapié. También en el consumo individual y en cómo gastar menos. «No sabemos la cantidad de euros que se van por no tener optimizada tu factura eléctrica», ha incidido Ruano, en referencia a aspectos como la potencia contratada, superior a la que la mayoría de las veces se necesita en un domicilio o una pyme. «Para ahorrar basta con poner una placa fotovoltaica, que hoy en día se amortiza en seis o siete años, no más. Incluso hay pago por ahorro, desde el minuto 1 el ahorro supera al préstamo para pagarlo», añadió.

Terrados apuntó al respecto otro simple 'truco'. «Bajar los termostatos en las casas. Bajar un grado es un 7% menos de consumo. No hay que ponerlo a 26-27 grados, con ponerlo a 22 está bien, no hace falta ir en camiseta en casa todo el día», subrayó.

Puso como ejemplo de apuesta y visibilización de proyectos el de instalar placas fotovoltaicas en el campus de Linares y el de Las Lagunillas. «En la educación hay que integrar la sostenibilidad en todos los grados. De 115 de grupos de investigación de la UJA, 15 o 20 están trabajando en energía sostenible», apuntó, con el temor, eso sí, de que «en época de crisis la investigación es de las primeras áreas que se resiente. Es probable que el año que viene haya menos fondos para investigar. Hay que hacer el esfuerzo de intentar hacer más con menos. No podemos dejar la investigación y buscar otros mecanismos en el entorno social, más con la empresa e igual tenemos que cambiar el foco y buscar investigaciones más aplicables».

Destacó entre estos grupos de trabajo uno para, con biomasa y bioetanol, obtener biocarburantes de los restos del olivar. En energía solar, los huertos solares «que los costes cada vez son más bajos y son ya competitivos». También investigan «en células de concentración y cosas que llegarán al mercado en 5-10 años, en minihidráulica, en eficiencia...».

Además, consideró que «el ciudadano de a pie y las pequeñas empresas tienen que mirar sobre todo el coste y más en los tiempos que corren. Pero el papel de las administraciones va por otro lugar. Tenemos que ser ejemplos y dar visibilidad de que funciona».

«Jaén es una provincia con marchamo verde desde hace muchos años. Tenemos sol y biomasa. Tiene que ser la opción de esta provincia. Tenemos que seguir trabajando en esto», apostilló. «Que la pandemia no nos paralice. Tenemos recursos autóctonos y una industria capaz de ponerla en valor y que las administraciones públicas lo visibilicen y 'tiren del carro'. Saldremos mejor de la crisis y de la pandemia».

«Amazon ya produce energía limpia en Sevilla, Ikea ha empezado a vender kits de energía solar. Algo está cambiando. Todos los días aparecen noticias de esta índole. El momento de apostar es ahora», señala Ruano. «Heineken ha sacado ahora su primera cerveza con energía sostenible. Las grandes marcas si lo están utilizando para vender», apuntó Terrados. «Hay muchos incentivos que vienen de Europa fomentando este uso eficiente. El sector privado ve el hándicap de la mejora competitiva a nivel de electricidad y eficiencia energética. Se ha despertado esa necesidad a nivel global. Muchas veces es por marketing, la forma de diferenciarse es que eres respetuoso con el medio ambiente», analiza.

Ruano ensalzó el proyecto de 23 millones de euros de la Diputación para economía baja en carbono, eficiencia energética y energía solar y biomasa, «creo que es la única provincia que ha hecho un proyecto de esta envergadura».

Puso sobre la mesa además otras medidas que empujen al cambio, como «reducir IBI si se hace inversión en energía renovable, como en Andújar que ya está al 50%, o que los coches eléctricos no paguen en la zona azul exento». «Tenemos el Jaén paraíso interior y a mí me gusta Jaén paraíso sostenible», apostilló.