3.500 vendimiadores parten a Francia
Muchos de ellos son jóvenes y acuden entusiasmados por ganar algún dinero, otros saben que echarán de menos a la familia
J. L. LÓPEZ FRUTOS
BAILÉN
Domingo, 27 de agosto 2017, 00:32
Un año mas, Bailén es punto de encuentro y partida para muchos trabajadores de la provincia de Jaen que parten a la vendimia francesa. Ayer ... sábado, una tarde de bochorno agobiante, llegaban autobuses de distintos puntos de las provincias de Jaén y Granada para partir juntos a la recogida de la uva en el departamento de Aviñón, en el sureste francés. Unos, con los nervios de la primera vez y otros con la experiencia ya de años en esta tarea, sabiendo que habrá momentos duros en los que echarán mucho de menos a los que dejan aquí.
Por eso Lucía García, de UGT, recomendó que los trabajadores no se vayan por su cuenta porque se pueden encontrar muchos problemas de alojamiento, contratos y demás. Miembros de este sindicato ofrecieron a los trabajadores folletos informativos y teléfonos para consultar cualquier incidencia que les pudiera ocurrir.
Según García, son unos 3.500 los trabajadores de la provincia de Jaén los que desplazan a Francia en estas fechas para distintas labores agrícolas, siendo mayor el número de hombres que el de mujeres, procedentes principalmente de los municipios de Valdepeñas de Jaén, Huesa y Marmolejo.
Llama la atención el numero elevado de jóvenes que este año parten al país vecino, la mayoría de ellos porque no tienen tajo en sus pueblos y alguno que otro porque necesita un dinero extra para sacarse el carnet de camión, como es el caso de Manolo García, un joven de la provincia de Granada. La esperanza de la mayor parte de ellos es «volver a casa con unos 1.500 euros en el bolsillo, que hacen un apaño muy bueno», decían mientras se despedian de sus amigos a través de mensajes del móvil, comentando que este año las compañías de telefonía móvil se han portado bien y van a poder usarlo sin sobrecargo
«Algunos de ellos, si combinan bien las distintas fechas de comienzo de los distintos departamentos franceses pueden trabajar en torno a 40 días y reengancharse con la recolección de la fruta si es que no lo han hecho antes», afirmó Lucia García.
Jessica era otra de las trabajadoras que ayer partía con su pareja. Ambos llevan ya trece años desplazándose a la uva de Francia con la ilusión de volver con un fondo para ir tirando, pero con la pena de dejar un niño de 6 años y una pequeña de cinco meses. «Eso es lo mas duro, porque del trabajo no nos asustamos, pero el estar lejos de los tuyos es menos llevadero».
Después de tomar un refrigerio de media tarde en un conocido restaurante de Bailén , partieron por la nacional IV camino del país galo. Muchas horas de viaje por delante al que hacen frente con mucho ánimo.
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