La semana en el Granada arranca con siete bajas

El único que estuvo trabajando con un readaptador fue Lucas Boyé, ya con movimientos con balón de giros y golpeos, por lo que se puede interpretar que le queda poco para volver a la dinámica de grupo. El resto de tocados sí salió a la charla técnica de Fran Escribá en el centro del campo de uno de los campos de la Ciudad Deportiva, pero luego se marcharon al gimnasio para seguir su plan específico.

Los que saltaron con zapatillas de deporte y no con botas fueron Miguel Ángel Brau, Ignasi Miquel, Manu Lama, Miguel Rubio y Pablo Insua. Sergio Ruiz sí estuvo integrado con los demás. Los dos primeros fueron titulares y completaron todos los minutos en El Plantío, aunque hay que tener en cuenta que el lateral izquierdo llevaba meses sin iniciar un encuentro (lo hizo con el Recreativo Granada), mientras que el central catalán, que la semana pasada cumplió 32 años, estuvo renqueante la semana pasada, aunque al final no tuvo problemas visibles para cumplir en Burgos.

Entre los demás, se vio a Insua lucir una cincha en su rodilla izquierda, un elemento que se suele emplear para quitar presión en los ligamentos. Será el transcurso de la semana lo que delimite quién vuelve a la dinámica, con Boyé claramente en la última fase.

En cuanto a los refuerzos de las categorías inferiores, Sergio Rodelas participó con los 'mayores', así como dos compañeros del filial menos habituales, Iker Perez y Nunes. Además, subieron dos chicos del Granada C: el portero Jean Luc y Mario Marín.