Robert Moreno juega de inicio con los tres delanteros del equipo, pero ninguno marca
Luis Suárez estuvo cerca de lograrlo en dos ocasiones, pero fue Antoñín -que ejerció de mediapunta- el que revolucionó el partido en la segunda parte
GRANADA
Domingo, 8 de agosto 2021, 00:06
Para cerrar la pretemporada el técnico rojiblanco, Robert Moreno, diseñó un once con un ataque que hasta ahora nunca había saltado de inicio a un ... terreno de juego: el integrado por Jorge Molina, Luis Suárez y Carlos Bacca, los tres delanteros del equipo rojiblanco.
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Aunque se antojaba interesante ver su actuación, en la primera parte recibieron tan pocos balones cerca del área que casi pasaron desapercibidos. Tuvieron que transcurrir 34 minutos para que Suárez, el más activo de todos, rematase un centro de Quini desde la derecha y se encontrase con una milagrosa mano del veterano meta Nauzet, uno de los mejores jugadores del partido. A Bacca y a Jorge Molina apenas se les vio, aunque este último le dio un pase magistral a Luis Suárez nada más comenzar el segundo tiempo que no fue gol –una vez más– por la inspirada actuación de Nauzet.
Las previsibles rotaciones mejoraron la cara del equipo en el tramo final, aportando Antonio Puertas algo más de chispa por la izquierda que el sustituido Jorge Molina. Aunque el ataque de este Granada convencido de las bondades del 4-3-3 terminó estando formado por Soro, Suárez y Puertas el jugador que revolucionó el partido fue un atacante con ganas de reivindicarse: Antoñín, que actuó de mediapunta. Suyo fue el centro que originó el penalti del empate y el pase a Adrián Marín que, con algo de fortuna, acabó por convertirse en el 2-1 definitivo.
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