Boyé recupera su mejor versión sin Uzuni al lado
El delantero argentino encadena dos jornadas consecutivas con goles, algo que no le ocurría desde su debut, y luce sintonía con Stoichkov
1. Si había un futbolista del Granada con ganas de que el equipo «pasara página» tras la marcha de Myrto Uzuni ese era Lucas Boyé. ... El argentino sabía que el equipo esperaba sus goles, después de prácticamente tres meses con problemas musculares, y su tanto de penalti al Sporting tras repetirse un primer intento que le adivinó Rubén Yáñez le hizo sacar todo lo que llevaba dentro. Toda la rabia.
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2. Nadie anhelaba más que el propio Lucas Boyé que el argentino recuperara su mejor versión. Sabedor de que no estuvo a la altura de la inversión que el club hizo por él hace dos veranos en Primera división, el delantero se encuentra especialmente implicado con la vuelta inmediata del equipo a la máxima categoría. Casi que como una responsabilidad personal.
3. Con el gol que hizo al Sporting, Lucas Boyé encadenó una segunda jornada con bingo tras el que le hizo al Levante sin impedir la derrota en el Ciutat de Valencia. Por raro que parezca, el argentino no lograba dos tantos consecutivos desde su debut. Entonces, en septiembre de 2023, marcó a Real Sociedad y Girona sin que ninguna de esas dianas valiera un solo punto; sí aportó uno, al menos, el que le hizo al Betis en su cuarto partido como rojiblanco.
4. No es casualidad que Lucas Boyé emerja ahora que ya no está Myrto Uzuni. Complementarios a priori por sus características, dada la tendencia del argentino por participar en el juego más allá del área y el talento del albanés por el desmarque hacia los espacios libres, los ya excompañeros entendían el fútbol de maneras muy distintas. Boyé dio a Uzuni tres asistencias, entre dos de la temporada pasada en los derbis a domicilio en Almería y en Los Cármenes con el Cádiz y la de la presente campaña contra el Tenerife, pero el goleador no pudo agradecérselo. Cuesta recordar abrazos entre ellos.
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5. Boyé escenificó contra el Sporting además que también es el encargado de heredar la responsabilidad de Uzuni desde el punto de penalti. Falló su primer lanzamiento, pero no dudó en volver a coger el balón cuando la invasión del área por parte del rival que luego despejó y tampoco sus compañeros le disuadieron; chutó al mismo lado, pero aún más fuerte y alto, mientras Yáñez cambiaba de lado en el juego psicológico.
6. El argentino acompañó su gol con otra actuación portentosa fuera del área sobre todo, con controles prodigiosos y gambetas elásticas pese a su corpachón para marcharse de los futbolistas del Sporting que trataban de arrebatarle el balón. Weissman no supo aprovechar los espacios que le liberó, como en la mayoría de precedentes, pero ahora tiene un socio nuevo que no tardará en sentar de nuevo al israelí.
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7. Ni media hora compartieron, y Stoichkov apenas había entrenado el día anterior, pero el gaditano y Boyé demostraron que pueden entenderse muy bien sobre el terreno de juego. También al delantero procedente del Alavés le gusta ocupar zonas intermedias para entrar en contacto con la pelota con frecuencia, pero pisó área con veneno y solo un paradón de Yáñez primero y quizás los nervios luego en una ocasión doble le impidieron besar el santo nada más llegar. La dupla tiene visos de continuidad inmediata desde este viernes en Elda.
8. Fran Escribá resaltó tras la victoria que nunca se puede repetir alineación después de una derrota, y es que contra el Sporting acometió hasta cinco cambios en la misma. Únicamente se vio obligado a la entrada de Pablo Insua por el sancionado Miguel Rubio, que también podría haber terminado en el banquillo aun sin cumplir ciclo de amonestaciones. La del recientemente firmado Abde Rebbach quedó justificada con sus primeros detalles de calidad.
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9. Sorprendió más la titularidad de Rubén Sánchez sobre Ricard en el lateral derecho, pero el futbolista cedido por el Espanyol recordó el nivel exhibido durante la goleada al Racing también en Los Cármenes. Mostró su potencia en las progresiones, asistió a Boyé en la jugada que acabó con el penalti y no sufrió atrás.
10. También cabía imaginar que Gonzalo Villar iría al banquillo tras sus errores con el Levante, y Martin Hongla y Sergio Ruiz endurecieron la medular. Con esos mimbres, recobrada la ilusión, los rojiblancos renuevan su candidatura al ascenso.
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