El Granada adapta otra espina dorsal
Las bajas de Vallejo, Rubio, Gumbau y Boyé obligan a los rojiblancos a una recomposición en su 'once' para intentar imponerse al Villarreal
El Granada vuelve a la rutina de la competición tras el terremoto que ha supuesto la destitución de Nico Rodríguez para sustituirlo con Matteo Tognozzi ... en la dirección deportiva. El foco gira desde los despachos al verde, donde el entrenador Paco López ha de adaptar una nueva espina dorsal a su equipo. Sin Vallejo y Miguel Rubio en defensa (lesionados), Gerard Gumbau en el centro del campo (acumulación de amarillas) y Lucas Boyé en la delantera (sancionado tras ser expulsado), el preparador de Silla tiene un galimatías por delante, sobre todo en el ecuador del terreno de juego.
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En la zaga, lo más probable es que retorne a la fórmula que empleó de inicio en los empates con Betis y Almería. Esto es, Ricard Sánchez y Carlos Neva como laterales, Ignasi Miquel y Raúl Torrente como centrales, dos zurdos por dentro que cumplieron con los verdiblancos, pese a un error de salida del canterano que costó una diana, y zozobraron con los indálicos.
Queda por ver si cabe algún otro elemento en esta ecuación, aunque ni Manafá ni Víctor Díaz apuntan a tener protagonismo inminente, uno porque ni siquiera ha debutado y el otro por sus problemas en la rodilla, con los que lidia como puede. Sí cabe en ella Álvaro Carreras, aunque de momento el gallego se ha prestado más a actuar por delante de Neva, como extremo, que en su posición natural.
Pero sin duda, reemplazar a Gumbau es lo que más quebraderos de cabeza le estará dando a Paco López. No tiene ningún futbolista con sus características, al reunir quite, altura, capacidad de elaboración y buen saque del balón parado. De la plantilla, Sergio Ruiz es el que más veces se ha empleado en el eje a lo largo de su carrera por lo que sería el relevo más lógico, seguramente al lado de Gonzalo Villar salvo que el míster quiera un perfil más físico y introduzca a un Petrovic que no ha sido titular aún esta temporada. En las bandas, Álvaro ha cumplido con solvencia en la izquierda, pero ocupa la pista de despegue que más gusta a Bryan Zaragoza, al que poco a poco el entrenador está derivando hacia la delantera, aunque con libertad de movimientos.
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Por la derecha, muchas dudas. Melendo no estuvo bien en El Sadar, pero tampoco se encuentran en un momento optimista Antonio Puertas y José Callejón. De entre estos tres lo normal es que el cuerpo técnico seleccione a uno para definir los acompañantes de una vanguardia en la que ganará relevancia Myrto Uzuni.
El albanés reaparece en el escaparate tras su suplencia en Pamplona, donde llegó sin entrenamientos tras su estancia con su selección. El pichichi de Segunda se ha quedado eclipsado por la irrupción de Boyé, pero sigue teniendo el gol entre ceja y ceja, aunque los cepos sean más peliagudos de sortear en la élite. A Uzuni, más que los defensas correosos de la máxima categoría, le preocupa que su pubis le siga restando explosividad, algo que resiente se fútbol, en el que estar en la mejor expresión física resulta determinante.
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El Granada quiere emprender un adelantamiento en la caravana de los lamentos clasificatorios. Ponerse en la franja de los equipos con nueve puntos y coger margen con Celta y Almería. Para ello, ha de derrotar a un Villarreal venido a menos, que no ha reaccionado en demasía con el cambio en el banquillo, de Setién a Pacheta. Los amarillos exhiben potencial pese a las muchas ventas que hicieron en verano y son un adversario que puede despertar en cualquier momento.
Los Cármenes tendrá que evitarlo con un nuevo espectador en el palco. Matteo Tognozzi, flamante director deportivo, comienza la evaluación en directo a su nuevo club. Tiene una semana con tres citas para ello, entre este lunes, la Copa el jueves y Mestalla el domingo. Allí sí estarán Gumbau y Boyé. El resto intentará que no se les eche de menos.
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