Futbolistas del Granada en el banquillo celebran la victoria en Huesca. Granada CF - Pepe Villoslada
Revulsivos con efecto

Pacheta activa el banquillo del Granada

La teórica disponibilidad plena en la plantilla ofrece al entrenador recursos a los que agarrarse durante los partidos

Miércoles, 1 de octubre 2025, 21:10

Dentro de la emoción indisimulada que supuso en el Granada lograr en Huesca la primera victoria de la temporada, Pacheta quiso compartir su felicidad muy ... especialmente con los futbolistas que salieron desde el banquillo e incluso con aquellos que permanecieron sentados. «Todos aportaron lo que preveía, y esa suma acerca el triunfo. Aquí todos somos importantes», recordó, satisfecho por comprobar que también quienes se quedaron sin minutos festejaron la conquista como si fueran los autores del gol de Pedro Alemañ. «La celebración me dice que estamos en el camino adecuado», abrochó el técnico, con la voz entrecortada. Hasta José Arnaiz, que bien podía imaginar un protagonismo mucho mayor, parecía eufórico en las imágenes del vestuario.

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En El Alcoraz, en concreto, Pacheta activó la rueda de sustituciones con Diego Hormigo a la hora de partido por las molestias físicas de Baïla Diallo y su riesgo de recaída. El defensa sevillano bien podía andar herido en su orgullo por ceder la titularidad que tanto le había costado ganarse en Burgos la jornada anterior, pero apretó los dientes y cerró bien el lateral izquierdo ante las ofensivas locales. Pocos minutos después, el entrenador ejecutó un triple cambio con relevos naturales de 'hombre por hombre' para refrescar al equipo con Martin Hongla, Pablo Sáenz y Moha Bouldini por Sergio Ruiz, Álex Sola y Jorge Pascual.

Los rojiblancos ganaron mordiente arriba con el marroquí y los tres en general mantuvieron el nivel, incluso el camerunés tras sus recientes semanas de flaqueza. Ya cerca del tiempo añadido, Loïc Williams reemplazó a Souleymane Faye para reforzar la zaga con un central más mientras el Huesca insistía en bombardear el área de Luca Zidane. Pese a defender la ventaja prácticamente toda la segunda parte, Pacheta y los suyos tuvieron final feliz.

A falta de que los revulsivos del Granada terminen de ejercer realmente como tales, sin que hasta ahora hayan servido para darles la vuelta a los partidos que a los rojiblancos se les pusieron cuesta arriba, al menos sí empiezan a tener cierto efecto. Seis días atrás, en El Plantío, Luka Gagnidze sí mejoró a Hongla justo antes del gol de Sola pero la salida del extremo precedió el empate local y Pablo Sáenz no fue ya tan punzante, con Diallo refrescando en esa ocasión a Hormigo. Las últimas variaciones, con Manu Trigueros y Loïc Williams por Pedro Alemañ y Pau Casadesús, ya fueron orientadas a retener el punto.

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Precedentes

Pacheta venía de darle muchas vueltas a su equipo durante la derrota con el Leganés en Los Cármenes, pero ni la sustitución de Sáenz por Arnaiz a la hora ni la entrada de Sergio Rodelas como carrilero por Pau Casadesús tuvieron incidencia apenas, más allá de la ubicación de Rubén Alcaraz en la zaga de tres hombres por Manu Lama. Algo más apretaron Gagnidze y el canterano Samu Cortés por Sergio Ruiz y Pedro Alemañ ya tras el 0-2, pero sin recortar distancias.

Ni tan siquiera en el empate de Málaga tuvieron demasiado protagonismo los hombres del banquillo. Alemañ rubricó la remontada ya tras el descanso, sin que el ingreso de Pascual por el lesionado Bouldini tuviera nada que ver ya que además luego perdonaría el 2-3, y tampoco Arnaiz aportó demasiado arriba por Sáenz entonces. Alcaraz y Hormigo cubrieron a Sergio Ruiz y a Sola, y Rodelas sí que pondría el centro que Pascual malogró tras relevar a Casadesús.

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Con el Mirandés en Los Cármenes sí firmó unas tablas momentáneas Sáenz como revulsivo por Arnaiz en la última titularidad del 'ex' de Osasuna, parte de un triple cambio tras la expulsión de Pere Haro y el 0-1 que también introdujo a Rodelas y Alemañ por Pascual y Trigueros, pero la entrada de Hormigo por Bouldini -que pidió salir, ya cargado- precedió el 1-2 cuando valía el reparto sin margen de reacción luego con Shon Weissman por Sergio Ruiz. También quedó en una leve mejoría lo de Ipurua con Casadesús y Pascual por Oscar y Sáenz al descanso, sin que Hormigo cosiera la herida tras la roja de Loïc Williams, superados también Dominique y Alemañ luego.

Fue aún peor lo de la inauguración de la temporada con el Deportivo de La Coruña en el Zaidín, con fichajes por inscribir y más allá de la honra de Cortés o Mario Jiménez desde el Recreativo, con el grave error de Pablo Insua previo al 1-3 y a su rescisión. Ahora, con disponibilidad plena, Pacheta ya tiene a lo que agarrarse cuando mira al banquillo.

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