Un instante del último entrenamiento del Granada. Ariel C. Rojas
Opinión Granada CF

Misión imposible

La otra mirada ·

Lo principal en esta carrera no es la estética sino que el equipo siga logrando victorias

Justo Ruiz

Granada

Viernes, 15 de noviembre 2024, 23:37

Uzuni marcó uno de los goles de su vida ante el Eldense. El delantero no se baja del tren de la ambición y se personó ... en dos de los tres tantos que decapitaron a un buen equipo levantino. Las ocho dianas que lleva el ariete albanés y la suma de la quinta victoria del curso no deben tapar la penosa imagen que ofreció el conjunto rojiblanco ante su sufrida afición. Querer jugar mejor al fútbol es una causa noble, pero poder hacerlo con esta plantilla va a ser una misión imposible. De modo que lo principal en esta carrera no es la estética sino que el Granada siga logrando victorias, o no perder cuando no pueda ganar, jugando a un nivel más alto o bajo pero siempre sabiendo qué pretende, qué busca y en qué dirección camina, no una semana en la de la felicidad por un triunfo agónico y en la posterior en la de la tristeza por una derrota merecida.

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El Granada sigue adelante, pero restando credenciales a sus aspiraciones de que sea un aspirante para subir a largo plazo. Durante todo el choque ante el Eldense fue un conjunto vulgar, temeroso en defensa, incapaz en el centro del campo y solo agarrado al salvavidas de Uzuni. Fran Escribá ha renunciado a los triunfos por la vía académica. Sus chicos alcanzan a duras penas la primaria en este deporte y los ha puesto a callejear, a afear los partidos renunciando al balón. No son tan malos, pero esa estrategia de la negación les conduce al horror, al sufrimiento, a ser peleles de una ocasión o de una carambola. Es insoportable, aunque dé resultado.

Más le vale al Granada no marcar primero, o si lo hace que sea en el minuto 93 con 0-0. Lo que en el fútbol actual supone ganar más de medio partido, adelantarse para el equipo granadino es una maldita bendición. Atrapa el tesoro y no sabe qué hacer con él. Paralizado por la felicidad, queda emparedado entre una multitud de incomprensibles complejos hasta borrarse del mapa sin dejar rastro en la geografía anímica. Se asemeja al pobre pasiego al que le toca la quiniela y se gasta la millonada en 24 horas con el consiguiente abatimiento por la pacata inversión. Lo más grave es que parece que nada ocurre. Esta normal anormalidad se ha instalado como aberración.

Los rojiblancos visitan al Sporting de Gijón, equipo en ascenso directo que atraviesa un buen momento. No es una salida propicia. El conjunto de Escribá necesitará subir su rendimiento si quiere algo positivo. Por fútbol se puede decir que la plantilla del Sporting tiene, de momento, un nivel superior a la del Granada. El entrenador, en un examen tan vital, no podrá contar con Uzuni y Hongla. Con esas bajas y con mucha necesidad llega a tierras asturianas. Veremos cómo saldrá de ello.

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