Opinión Granada CF

Pre-pretemporada

El fútbol es cada vez más dependiente del aspecto condicional. La preparación física y biológica –es decir, el tridente 'entrenamiento-descanso-alimentación'– es de vital importancia para quien quiera ser competitivo. La pre-pretemporada, conocida en la literatura científica como 'off-season', suele estar acotada por los quince días previos al inicio de los entrenamientos como mínimo. De esta manera, el impacto fisiológico será menos agresivo ya que la existencia de una condición física básica previa permitirá la asimilación de los diferentes estímulos de forma estable y segura.

Estable porque los estímulos o sesiones de entrenamiento, si están correctamente diseñados y correlacionados en el tiempo, permitirán unas adaptaciones o mejoras permanentes a nivel estructural y funcional; y segura porque, de seguir los patrones mencionados anteriormente, la mejora del rendimiento no debe conllevar la aparición de molestias que deriven en lesiones que frenen en seco todo el proceso de adquisición del estado de forma ideal. Por todo ello, resulta fundamental encarar la pretemporada de modo que la primera sesión de entrenamiento de la misma sea el décimo estímulo estresante, aproximadamente, soportado por el organismo.

Y es que, si no tenemos en cuenta accidentes tales como torceduras, choques o heridas puntuales, la mayor parte de las lesiones son fruto de sobrecargas, y, por lo tanto, resultan evitables con una buena pre-pretemporada. Otro tema aparte a valorar sería la sobredosis de partidos en el calendario que hace que el jugador no disponga, prácticamente, de tiempo para desconectar como para luego reconectar de esta forma paulatina. Reflexionemos pues.