Mariño recuperará la titularidad con afán por reivindicarse

Fue precisamente una convalecencia previa de Luca por otro esguince pero en la rodilla izquierda la que propició el fichaje de Mariño. Las actuaciones de Marc Martínez tanto en la derrota que inauguró la temporada con el Albacete en Los Cármenes como en el empate con el Deportivo también en el Zaidín llevaron al club a recurrir al mercado libre ya en septiembre para hacerse con el vigués, que llevaba todo el verano sin equipo tras acabar contrato con el Almería. Sin embargo, Guille Abascal prefirió darle continuidad al catalán durante las nuevas tablas en Elche y con el Málaga de nuevo en casa.

Tendría que ser ya Fran Escribá quien apostara definitivamente por Mariño bajo palos. Ni el cambio de entrenador ni la primera titularidad del vigués bastaron para impedir en Burgos que el equipo volviera a encajar otros dos goles que además tiraron por tierra las ventajas que había logrado en el marcador. Ambos revulsivos sí serían eficaces a partir de la siguiente jornada, con hasta cuatro victorias consecutivas con tres porterías a cero seguidas además ante Mirandés, Córdoba y Tenerife que solamente rompió el Castellón a domicilio. Aquella racha permanece desde entonces como la mejor del Granada en lo que va de temporada.

Mariño perdió de golpe el aura de imbatibilidad que parecía haberse granjeado en los goles de Israel Suero para el Castellón, sobre todo en el primero, sin chafar la victoria durante el añadido gracias a un gol de Myrto Uzuni de penalti. También pudo hacer más, sin embargo, en los que sí costaron las derrotas con Levante y Zaragoza e incluso en los del Eldense aunque el albanés amarrara de nuevo los tres puntos sobre la bocina. Sí pareció vendido en el tanto de Juan Otero para el Sporting en El Molinón, con nuevo desenlace afortunado ya en la recta final, y volvió a dejar a cero su portería durante el derbi con el Cádiz en Los Cármenes. Aun así, la remontada sufrida en Almería y la heroica actuación de Luca en Zaragoza por la Copa tanto parando penaltis como marcando el suyo propio en la tanda propiciaron un nuevo relevo, sin apenas discusión desde entonces.

Luca recuperó el puesto con goleada al Racing y portería a cero en Los Cármenes, pero desde entonces tuvo unas tardes más afortunadas que otras. También el portero francés pagó la irregularidad del equipo, aun con otras dos metas impolutas más, que aún le tienen por detrás de Mariño en ese aspecto. Su lesión le abre ahora una nueva oportunidad al vigués, camino de los 35 años y con contrato hasta final de temporada. Tratará de acabar sin goles en contra frente al Racing de Ferrol.