El Granada volvió a ganar tras cuatro partidos sin hacerlo. El equipo rojiblanco se reencontró con la victoria, ya que con el fútbol apenas lo ... ha hecho a lo largo de la temporada. Se impuso a un débil Racing de Ferrol que dio todas las facilidades del mundo a los locales. No ganaba el conjunto de Escribá desde el 31 de enero cuando se impuso al Eldense por 0-3. Es obvio que los malos resultados, las crisis y las dinámicas negativas generan desconfianza y aumentan los nervios. Por eso el valor de los tres puntos ante los gallegos es tremendo. El Granada vivía lejos de la victoria, que se había convertido en algo casi quimérico. La goleada en el Nuevo Arcángel ante el Córdoba certificó el peor momento del curso, una trayectoria que alejaba a los granadinos de los puestos de promoción. Datos terribles cuando la temporada llega a un momento crucial. El Granada se había derruido sin remedio y en esa caída, por mucho empeño que se pusiera, las bajas no eran la causa principal.
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El Granada se encuentra ante la responsabilidad y el deber de pelear con voracidad por recuperar la categoría perdida, un compromiso que se le ha trasladado al técnico y los jugadores. No puede quejarse Fran Escribá de falta de respaldo. El club ha sido un muro hasta el momento con él, sin dudar ni un segundo en su defensa pese a que hayan empezado a aparecer voces en los foros que piden su cabeza. Incluso Los Cármenes ha tenido un comportamiento muy benevolente con el técnico. No quiere decir que ese apoyo no conlleve exigencias, aunque sea de puertas adentro. Al valenciano y a los futbolistas se les ha pedido que el Granada pelee a muerte por el ascenso, sin excusas ni coartadas, conscientes de que se tiene la obligación propia de un club grande, con una masa social minuciosa y un entorno exigente. Se sabe en el club, aunque no se exponga, que el equipo está pasando por un mal momento, el peor de la temporada. El proceso, sin embargo, está dejando demasiadas dudas.
Este irregular conjunto granadino inicia el tramo decisivo para intentar luchar por el objetivo. Comienzan ante el Cádiz las doce últimas jornadas, la hora de la verdad para un Granada anclado en la octava plaza. Sin embargo, los rojiblancos llegan a este tramo empinado por la dureza de los enemigos con malos síntomas, en el fútbol y en los datos.
No es el Cádiz el mejor rival para reencontrarse con la victoria a domicilio. El adversario va de menos a más y ya está a tan solo dos puntos de los granadinos. Es un equipo más intenso, solidario y ordenado, y después hay que recibir al Oviedo. Sí, para el Granada llega la hora de la verdad. Necesitará su mejor versión. La misma versión que lleva tanto tiempo sin dar...
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