Un jugador expulsado en la mitad de los duelos ligueros de Paco López

El juego del entrenador valenciano, menos encorsetado tácticamente que Aitor Karanka, provoca que tanto el Granada como su rivales intercambien más acciones cerca de las áreas y, en consecuencia, se expongan más las defensas de los equipos. Los granadinos acumulan dos expulsiones, ambas en un balón en profundidad. Ante el Lugo, como contra el Leganés, Miguel Rubio no llegó a tiempo de frenar al defensor y eso le costó la segunda amarilla, al igual que a Raúl Fernández la tarjeta roja en el debut a domicilio en Liga de López. Antes de ese partido los rojiblancos habían disfrutado de una superioridad ante el Albacete que fue determinante para amarrar los tres puntos en un encuentro abierto a pesar de la inferioridad numérica de los manchegos.

Contra el Lugo, la escasa afición que se dio cita en el encuentro del Anxo Carro, pudo ver cómo el Granada no bajó los brazos a pesar de encontrarse con un jugador menos, pero el esfuerzo volvió a ser, como en Leganés, insuficiente.