Las diferencias del 'caso Granada' con los de Alcorcón o Fuenlabrada

Sin embargo, el viernes siguiente el Alcorcón anunció que hubo un «error de laboratorio en los resultados de PCR» y que todos los implicados dieron negativo en tres pruebas consecutivas de PCR y antígenos. En aquella comunicación oficial del propio club alfarero se informó de que uno de los cuatro casos positivos por PCR en la previa al Alcorcón-Ponferradina se sometió a continuación «a cinco test (dos PCR y tres de antígenos), y todos ellos salieron negativos». Por esta razón se le permitió retomar la competición el lunes 26 de octubre contra el Mallorca. Además, el segundo partido suspendido, frente al Sabadell, no computó en el límite de dos suspensiones previsto por la normativa de competición al haber sido producto de resultados médicos erróneos.

El episodio del Alcorcón no fue tratado como brote finalmente. De acuerdo al comunicado hecho público por LaLiga hoy mismo ante el caso del Granada, este debe considerarse ante «cualquier agrupación de tres o más casos con infección activa y detección simultánea o cercana en el tiempo (hasta 72 horas), en los que haya indicios lógicos de vínculo epidemiológico».

En todo lo que está sucediendo al Granada tiene que ver el precedente del 'caso Fuenlabrada'. Entonces, el equipo madrileño de Segunda división viajó a Coruña para medirse al Deportivo en la última jornada de Segunda división pese a haber conocido un caso positivo en la noche del sábado 18 de julio que se amplió a cuatro con tres casos más el domingo –no jugadores-, por lo que según entendió el CSD debió haberse considerado un brote al sobrepasar los tres contagios y haberse impedido el desplazamiento del resto de la plantilla el lunes, con integrantes que, según LaLiga, contaban con dos PCR negativas y un test rápido también negativo entre el sábado y el domingo.

Sin embargo el lunes por la tarde, y ya en Coruña, la expedición del Fuenlabrada fue informada de los positivos de tres jugadores y un miembro del staff técnico. El partido fue suspendido un par de horas después y, a medianoche, tanto el club como LaLiga conocieron que, tras un «reproceso total», se confirmó el positivo de dos jugadores mientras que el otro futbolista y el miembro del staff dieron negativo. Al día siguiente, no obstante, comenzaron a surgir nuevos casos, que terminaron elevándose hasta los 18, provocando que la expedición al completo guardase cuarentena en su hotel de Coruña y requiriendo la hospitalización del exrojiblanco Chico Flores. Once días después, los 33 miembros de la expedición del Fuenlabrada dejaron Coruña de vuelta a Madrid.

Según abordó el Consejo Superior de Deportes entonces, «se cometió un grave error al emprender el viaje». «Los que se hicieron la prueba el lunes por la mañana debían haber quedado aislados hasta conocerse el resultado (lo que ocurrió cuando ya estaban en A Coruña). Ante la aparición de un brote, el equipo no debió viajar el lunes, por un principio elemental de prudencia, incluso en el caso de que sea cierto que los restantes PCR practicados el mismo domingo dieran negativos», consideró. «De acuerdo a los hechos recogidos en el informe de LaLiga, parece que el Fuenlabrada incumplió los protocolos. Por tanto, el problema no está en estos, sino en su mala aplicación», se añadió.

De ahí que, en esta ocasión, LaLiga haya exigido al Granada que su expedición hacia San Sebastián este domingo no incluya más que a futbolistas que «tengan el índice IGG positivo o presenten un PCR negativo y no hayan viajado a Chipre». Un mayor nivel de exigencia en su protocolo dispuesto para evitar, tras considerar el brote, precisamente lo que ocurrió con el 'caso Fuenlabrada'.