Una camada anterior entre Segunda, Primera RFEF y el extranjero

Sí es titular habitual con su equipo en Segunda división el granadino Diego Collado (2001). El delantero del Villarreal B, formado en el Ciudad de Granada, debutó con el primer equipo castellonense ya la temporada pasada en Copa del Rey con un gol incluso y en esta volvió a ser reclamado por Pacheta para el torneo del KO, pero aún no ha tenido minutos en Primera.

También es protagonista en la categoría de plata Hugo Vallejo (2000), extremo izquierdo del Huesca, que le firmó procedente de la descendida Ponferradina. Ya jugó en Segunda con el Málaga, que le reclutó como cadete tras formarse en el Granada desde alevín, antes de que lo fichase el Real Madrid para cederlo al Deportivo de La Coruña y venderlo luego al Valladolid, del que se desvinculó el verano pasado tras jugar dos partidos en Segunda con su primer equipo.

Sí le está costando mucho más destacar en Segunda a Pablo Moreno (2002). El delantero granadino juega poco en el Andorra, con una sola titularidad esta temporada, tras firmar allí después de una experiencia poco satisfactoria en el Marítimo de la primera categoría de Portugal. Tampoco le fueron mejor sus dos cursos anteriores cedido al Girona por el Manchester City, del que ya se desvinculó tras firmarle en 2020 tras dos años en la Juventus que a su vez le captó de las categorías inferiores del Barcelona, donde se hartó de hacer goles tras salir de Granada.

En Portugal se encuentra Óscar Aranda (2002), adquirido por el Famalicao procedente del Real Madrid. Pese a un debut esplendoroso con un golazo triunfal, el extremo desapareció de las alineaciones de su equipo aunque en las últimas semanas volvió a contar y fue titular antes del presente parón. Fundamental para Raúl en el Castilla pese a verse tristemente envuelto en la acción decisiva del último 'play off' de ascenso a Segunda, contra el Eldense, fue blanco desde juvenil tras ir allí procedente del Málaga, que le captó como cadete desde el Granada. También busca su sitio aún en España, pero en Primera RFEF su hermano Antonio (2000), por explotar en el Lugo tras su experiencia fallida de dos campañas en el Barça B después de no renovar con el Granada.

Quien recaló durante el pasado mercado de invierno en un claro aspirante al ascenso de Primera RFEF a Segunda es Carlos Puga (2000), lateral derecho de Albuñol firmado por el Málaga como cedido procedente del filial del Atlético. Ya jugó en esta categoría aún antes con el Córdoba y posee pasado granadinista de alevín a cadete. En el Málaga coincidirá con el mediocentro Ramón Enríquez (2001), estancado por las lesiones e inédito aún esta temporada.

También juega en Primera RFEF el centrocampista Neskes (2001), firmado en invierno por el Teruel procedente del Ibiza tras jugar la temporada pasada en el Unionistas de Salamanca. Formado en el Granada desde cadete tras pasar por el Maracena, se fue al filial del Cartagena en 2020 sin cuajar allí. Una categoría más abajo, en Segunda RFEF, el Espanyol firmó para su filial en enero al central Ángel Gómez (2001), ya convocado con el primer equipo en dos ocasiones en Segunda. Llegó allí del Villanovense, que se hizo con él en verano tras actuar cedido en el Arenas en Tercera RFEF por parte del Granada, el club en el que se formó.