La baja de Gonzalo Villar deja seco al trivote de Escribá en el Granada
El técnico rojiblanco cambia sin éxito de sistema y no apuesta por la continuidad del recreativista Oscar
La salida a La Romareda supuso la renuncia al 4-4-2 predilecto de Fran Escribá. El técnico buscó sorprender a un rival de enjundia ... con un trivote en el centro del campo que diera rienda suelta a la creatividad de Manu Trigueros y Gonzalo Villar con Martin Hongla como mejor escudero. Un plan más que interesante que se truncó antes del pitido inicial.
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La lesión del murciano en el calentamiento obligó a Escribá a alinear a Sergio Ruiz en una medular con extra de cemento que no llegó nunca a unir los ladrillos rojiblancos. El cántabro no es el del curso pasado y acabó lesionado. La creatividad de Trigueros se vio ahogada ante el bloque bajo zaragocista y Hongla fue el único que peleó con entereza antes de retomar el esquema de dos puntas con la entrada de Lucas Boyé.
En defensa Escribá confió en las vacas sagradas en detrimento del joven Oscar, que cuajó una gran actuación la semana pasada contra el Levante. Una decisión que le salió rana ante la pasividad de Miquel y Rubio en el primer tanto de Iván. El entrenador trató de revitalizar al equipo con varios cambios, pero dos de ellos acabaron expulsados cuando el equipo se metió en el partido. Una tarde horrorosa.
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