Ángel Montoro se señala el escudo al marcar al Nápoles en la Europa League. EP
Leyenda del Granada

La vuelta del autor del gol de Nápoles

Ángel Montoro, artífice del último ascenso a Primera y de la clasificación para la Europa League, regresa a Los Cármenes por primera vez tras desligarse

Viernes, 24 de marzo 2023, 01:07

Cinco temporadas como rojiblanco después, Ángel Montoro dejó Los Cármenes el pasado 22 de mayo con el equipo de nuevo en Segunda división y sin ... saber si iba a volver a jugar como local en ese estadio, pero temiéndose que no. Semanas después, y tras barrer la propiedad del club a los directivos que consideró responsables del descenso, el nuevo responsable del área deportiva, Nico Rodríguez, le llamó para comunicarle que no iba a seguir una vez expirase el contrato al que le quedaban unos días en vigor. El final más triste posible para una leyenda del Granada, artífice no solo del último ascenso a Primera sino de la clasificación para la Europa League en la primera participación continental de la entidad en su historia. Este domingo, el autor del memorable gol de Nápoles regresa por primera vez a la que siempre será casa.

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Diez mil minutos como futbolista del Granada llegó a acumular Ángel Montoro, ahora rival en el Oviedo, que le abrió sus puertas tras quedarse sin equipo el pasado verano. Indiscutible para todos sus entrenadores como rojiblanco, no encontró una pareja estable en la medular hasta el fichaje de Fede San Emeterio en su segunda campaña, ya con Diego Martínez, quien le convirtió en su extensión sobre el terreno de juego. El valenciano fue el director de una orquesta magistralmente coordinada y tras el salto de categoría en Mallorca, su día más feliz, el club le hizo acompañar de Maxime Gonalons y Yangel Herrera, los 'tres tenores'.

El remate de cabeza de Montoro en el Maradona. EP

Las tardes de gloria que compartió con ellos, aun sin aficionados en las gradas, tuvieron su clímax en el Estadio Diego Armando Maradona de Nápoles en la vuelta de los dieciseisavos de final de la Europa League. Corrían 25 minutos, y los locales llevaban desde el tercero a un gol de forzar la prórroga, cuando Dimitri Foulquier colocó un centro preciso al área y Ángel Montoro apareció en el punto de penalti para saltar, encoger el cuello y dirigir la pelota hacia la red, pegada al poste, con un testarazo académico. Le salió del corazón agarrarse el escudo y mostrarlo a quien pudiera verlo, presumiéndolo ante toda Europa, en una escena icónica para la historia del Granada desde que terminase el partido con todo el sufrimiento que aún le quedaría.

La impotencia del descenso

Nada fue lo mismo sin Diego Martínez, tampoco para Ángel Montoro. Aunque jugó las quince primeras jornadas sin excepción con Robert Moreno, las lesiones le castigaron sobremanera y poco a poco fue desapareciendo de los planteamientos, mientras el equipo se dirigía hacia el descenso. Ni tan siquiera pudo ir convocado a las tres últimas jornadas. Tras vestirse de rojiblanco por última vez 21 días atrás contra el Celta en Los Cármenes, cuando fue titular y sustituido a la hora, sufrió impotente desde un palco para futbolistas sin convocar el dramático encuentro contra el Espanyol.

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Ahora en el Oviedo, con el que ya lleva disputados 26 partidos y persigue la renovación automática por otra temporada más, Ángel Montoro juega por salvar a su equipo del descenso a Primera RFEF. Como la temporada pasada en el Granada, también tuvo minutos sin excepción en las quince primeras jornadas, titular en diez de ellas y en seis de manera consecutiva hasta reencontrarse con los rojiblancos en noviembre. Contribuyó a la resistencia de los suyos con un futbolista menos y levantó los brazos en la distancia cuando Sergi Enrich sorprendió a Raúl Fernández con un taconazo; cumplida la misión, fue sustituido en el añadido bajo la ovación de su nueva afición.

Protagonismo intermitente

Un nuevo percance fibrilar en el aductor, que ya fue la zona dolorida durante sus últimas semanas en el Granada, le apartó de las seis siguientes jornadas y le impidió jugar de nuevo contra los rojiblancos ya con Paco López en el cargo en el partido de Copa del Rey. Desde entonces viene teniendo un protagonismo intermitente con Álvaro Cervera, que le dio los mandos en sus primeros encuentros mientras estuvo apto. Aunque lleva siete jornadas consecutivas con minutos, solamente en dos de ellas lo hizo como titular: en el empate contra el Albacete en el Tartiere, cuando ocupó la banda izquierda para suplir a Hugo Rama, y en la reciente victoria en Leganés, cuando sí actuó en la sala de máquinas junto a Luismi.

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A Montoro le gustaría jugar más a menudo porque, a sus 34 años, se siente bien. Busca la titularidad en Los Cármenes y, allí, los aplausos de todos aquellos a los que tan felices hizo. En Granada se reencontrará con muchos amigos, futbolistas y empleados de todo tipo, que le abrazarán con un cariño sincero. Algún día volverá a la ciudad para quedarse.

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