Vecinos de Iznalloz se oponen a una orujera y consiguen paralizar la obra

Cuenta la portavoz de esta plataforma, Toñi Carrillo, que detectaron que en estos terrenos, de un paraje al que llaman Terre, estaban haciendo «un desmonte brutal». Su sorpresa fue el conocer que la empresa estaba realizando el movimiento de tierras sin licencia de obras, por lo que el Ayuntamiento paralizó estos trabajos. «Conocemos el humo blanco que sale de la orujera de Bogarre. Eso son 365 días echando humo desagradable, que pica en los ojos», señala la representante vecinal.

El Ayuntamiento de Iznalloz ordenó, mediante resolución, la suspensión de las obras a una mercantil que desarrolla el grueso de su actividad en Pinos Puente. Si la orden fuese desatendida, se podría retirar la maquinaria de la empresa e imponer multas coercitivas del 10% de las obras ejecutadas.

La plataforma de vecinos es la denunciante y aseguran que seguirán pendientes de los informes sectoriales que vaya recibiendo este proyecto de «orujera» según han comprobado «en el expediente».

Toñi Carrillo asegura que han visto en la documentación que será una fábrica de transformación de los residuos de la aceituna y que ocupa ni más ni menos que «20 hectáreas de terreno».

«Al Ayuntamiento, que ha dado ya el visto bueno al proyecto otorgándole el 'interés general' se lo habrán pintado muy bonito, porque le dirán que creará puestos de trabajo y porque el Consistorio ingresa dinero por tener esa instalación en su término municipal», expresa Toñi Carrillo.

Según cuentan desde la plataforma e indica el expediente municipal, ahora la empresa tiene dos meses para presentar la documentación y legalizar las obras o para reestablecer los terrenos a antes de meter las máquinas.

«Pediremos pronto cita con el alcalde para que nos enseñe la documentación porque no puede hipotecar la vida de los vecinos de su pueblo como los de Bogarre, que están amargados», lamenta la representante de la plataforma denunciante.

El alcalde de Iznalloz, Mariano Lorente, señala que la solicitud por parte de esta empresa que consta en el Ayuntamiento es para la instalación de una balsa de almacenaje de alperujo, no para su tratamiento.

Como se encuentra en suelo rústico debe aprobarse mediante la figura de 'proyecto de actuación', algo que ya se ha aprobado en pleno y que es el paso previo antes de tramitar la licencia de actividad, en primer término, y la de obra, de manera posterior.

Mariano Lorente explica que el proyecto ha conseguido el visto bueno de las diferentes administraciones implicadas como la Diputación, que tiene una carretera cercana o la Confederación Hidrográfica. «El Ayuntamiento concederá la licencia de actividad solo para este depósito de alperujo y, posteriormente, tendrán que solicitar la de obras», aclara el alcalde.

El primer edil de Iznalloz explica que se abrió el expediente a instancia de estos vecinos por estar la empresa realizando un movimiento de obras sin la licencia municipal. Lorente explica que ha hecho un requerimiento a la Policía Local para que se pase por las obras con el fin de comprobar que continúan paralizadas y que, la inspección, será durante esta semana.

El alcalde señala que, por ahora, solo tienen constancia de la instalación de esa balsa de alperujo y no de la fábrica para su transformación, que es la que produce el humo durante el secado de los restos de la aceituna. «Esto es lo que únicamente ha solicitado el promotor por ahora y para lo que se le dará licencia de actividad y de obra. Se supone que el siguiente paso será la instalación de una infraestructura anexa para el tratamiento de los restos y si esto se produjera, tendría que pedir permisos nuevos y estaríamos muy pendientes de la actividad que se fuese a realizar en el municipio», señala Mariano Lorente.