Un vecino de Granada ahorca a su propio perro porque le mordió un dedo y lo va promulgando

La Guardia Civil detuvo a este hombre después de que acabara con la vida de su can, un American Stanfordshire (una raza de las consideradas peligrosas) porque le mordió el dedo. En lugar de reprenderlo cogió una cuerda y lo ahorcó, como él mismo ha reconocido a los agentes.

El investigado, añade la Benemérita, no solo cometió un presunto delito, sino que además lo fue contando a quien quiso escucharlo. En el Ayuntamiento de Las Gabias se enteraron de la muerte del animal y alertaron a la Guardia Civil de la localidad, que abrió una investigación.

Por otra parte, la Guardia Civil informa también de otros casos de abandono de animales, en concreto seis perros de un vecino de Zafarraya y a los diecisiete perros de otro vecino de Alhama de Granada. En ambos casos los propietarios de los perros incumplían la normativa que regula la protección y el bienestar animal.

Las numerosas anomalías que descubrió la Patrulla del Seprona de la Guardia Civil de Alhama al inspeccionar las instalaciones donde estaban los perros, ponían en peligro la vida de estos animales, por lo que ambos fueron investigados y puestos a disposición judicial por un delito leve de abandono de animales domésticos.