Tres embalses de Granada empiezan el año hidrológico en mínimos históricos recientes

La situación en términos generales continúa siendo muy similar a la del año pasado y algo mejor que la del último período de sequía

Juanjo Cerero

Granada

Lunes, 13 de octubre 2025, 10:40

Los once embalses que hay repartidos por el territorio de la provincia granadina comenzaron este 1 de octubre el año hidrológico en una situación en ... términos generales muy similar a la que registraban el año pasado por estas fechas, aunque el estado de algunos de ellos resulta especialmente preocupante. Aun así, el dibujo de situación continúa siendo mejor que la del período de sequía 2021-2023, cuando la mayoría de ellos llegaron a mínimos históricos recientes, según la serie de datos que publica la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).

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En términos totales, los pantanos de Granada albergan cuando se inicia el año hidrológico un total de 362 hectómetros cúbicos de agua, de acuerdo con las cifras de Embalses.net, lo que supone encontrarse un poco por debajo del tercio de su capacidad;en concreto, en el 30,94%. Los datos de la misma semana del año pasado son prácticamente calcados: entonces eran 364 los hectómetros cúbicos, lo que se traduce en un 31,11% de su capacidad; es decir, que la diferencia entre ambos momento es de un inapreciable 0,17%.

En la foto fija, y observando la serie histórica reciente de cifras de los últimos diez años que ofrece el Sistema de Información Hidrológica de la CHG, se puede comprobar que tres de los nueve embalses que gestiona esta entidad –Béznar y Rules son parte de Hidrosur– han alcanzado en las últimas semanas valores mínimos de agua almacenada.

En concreto, se trata de los de San Clemente, Francisco Abellán y Cubillas. El primero, íntegramente situado en terrenos del municipio de Huéscar, estaba en mínimos de la década al inicio de la semana, con 6,989 hectómetros cúbicos de agua. El segundo, abastecido por el río Fardes y con anclaje en La Peza y Cortes y Graena, almacenaba el pasado sábado 5,078 hectómetros cúbicos de agua, la cifra más baja desde septiembre de 2015. Menos agua quedaba en el del Cubillas, situado en Sierra Elvira, cerca de la localidad de Albolote, donde el valor más reducido en este lapso de tiempo, de 3,964 hectómetros cúbicos, se alcanzó el día 20. Estos registros se encuentran muy lejos de las medias de los datos que la CHG recogió durante el período completo. En el caso del de Francisco Abellán, este mínimo está un 75% por debajo del valor promediado, mientras que en el caso del pantano del Cubillas la brecha se queda en los 55 puntos porcentuales.

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Lejos de ser normales

Lo cierto es que, aunque el estado promediado de todos los embalses siga siendo muy similar al de 2024, las variaciones individuales son en algunos casos muy significativas. Esto es lo que ocurre, por ejemplo, con el de Colomera, que tiene hasta un 53,7% menos de agua que hace doce meses, o en el ya mencionado de Francisco Abellán, que cayó un 41,8% en el mismo período. Por el lado contrario, hasta un 39% aumentó el volumen embalsado en el pantano de El Portillo, situado en el término municipal de Castril. También mejoraron sus datos los de Rules (+23,8%) y Bermejales (+11,8%).

En lo que sí coinciden la inmensa mayoría de los once es en seguir muy por debajo de las cifras anteriores al inicio del período de sequía grave que comenzó en 2020 y fue especialmente preocupante hasta el último cuatrimestre de 2023. Durante aquella etapa, más de la mitad de las infraestructuras gestionadas por la CHG registraron los valores de agua embalsada más bajos de los diez últimos años.

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La situación desde entonces ha mejorado, lo que ha permitido que deje de estar en el horizonte la posibilidad de enfrentarse a restricciones en el suministro, que llegaron a estar en el debate, en especial en lo que se refiere a su uso agrícola e industrial y no tanto para el consumo humano. Sin embargo, es cierto que la diferencia de los datos actuales con respecto a la media de la década sigue siendo preocupante y que no haya habido apenas movimiento en un año podría indicar una nueva normalidad poco halagüeña.

Con respecto a los datos promediados del conjunto del período de análisis, todos los embalses de la cuenca del Guadalquivir muestran una caída significativa en el volumen de agua almacenada. La caída más importante es la del de Francisco Abellán, con un 75% menos que durante el tiempo de referencia. Otros tres (Colomera, Cubillas y San Clemente)registran asimismo una brecha superior al 50% en este sentido. Por al lado contrario, las caídas más bajas se han dado en los embalses de El Portillo (-16,3%) y Quéntar (-16,8%).

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