Fuego en Granada

«Fue un susto muy grande; pensamos en recoger todo e irnos»

Este pasado lunes, alrededor de las dos de la tarde, se declaró un incendio en el entorno de San Miguel Alto, junto al Sacromonte. Las llamas arrasaron 2,43 hectáreas de matorral y se quedaron a apenas dos metros de las viviendas. «Cogimos mangueras y colaboramos entre todos», explicaba una de las vecinas del lugar.

No es la primera vez que el fuego llega a las proximidades de sus viviendas. Esta estampa se repite año tras año. «Los vecinos ya estamos preparados para luchar contra los incendios», indicaban los residentes en la zona. Tras la rápida actuación del Servicio de Extinción de Incendios Forestales de Andalucía (Infoca) y el Cuerpo de Bomberos de Granada, el fuego quedó estabilizado a las 16.20 horas.

Las aeronaves que sobrevolaron San Miguel Alto durante la fase crítica pudieron retirarse al 17.50 horas, que fue cuando se dio por controlado el siniestro. «Nos dijeron que tuviésemos cuidado con los retardantes de fuego que lanzaba el helicóptero», narraban Josiah y Laura, dos afectados que trataron de colaborar para que las llamas no devoraran la casa en la que ahora están instalados.

«Pasamos mucho miedo», contaba Laura. «Fue un susto muy grande, pensamos en recoger todo e irnos de casa», detallaba aún con incredulidad. Su vivienda se encuentra a un metro de lo que ahora se ha convertido en campo calcinado. Ambos utilizaron lo primero que encontraron para evitar que el fuego llegara a su inmueble y ahora lamentan la situación en la que se encuentran sus vecinos. «Nos sentimos mal por la señora que vive justo arriba, ha venido a buscar agua aquí porque se quemó su tanque», decía Josiah.

A pesar de tener que recorrer un largo camino para conseguir agua, los testigos señalaron que su vecina había tenido «suerte» porque su techo podría haberse quemado, pero, «afortunadamente», no fue así.

A las 21.45 horas, el Infoca dio por extinguido el incendio, pero todavía ayer permanecían en la zona dos operarios del Infoca y dos agentes de la Guardia Civil vigilando uno de los focos del incendio.

Autogestión preventiva

Antes de eso, se había originado un primer incendio en el solar de la 'Verea de Enmedio'. Allí, las llamas rozaron varias viviendas, pero fueron sofocadas en cuestión de minutos. Los vecinos también refrescaron la zona para que las llamas no se propagasen.

Las ramas y matorrales secos, junto con la basura que se acumula en varios terrenos, sirvieron de combustible para la proliferación de las llamas. «Esto no hubiese pasado si el campo estuviese en buenas condiciones», añadieron las personas consultadas por IDEAL.

Ante la repetición de este tipo de sucesos año tras año, los residentes han puesto manos a la obra y luchan «todos juntos» contra el fuego. «Ya nos hemos traído herramientas para desbrozar el campo». Es decir, que han optado por una especie de autogestión preventiva. A los vecinos de San Miguel Alto solo les queda el consuelo de que, lo que se ha quemado, «no volverá a arder más este año; al menos, nos da una sensación de seguridad», afirmaban señalando al horizonte.

Ayer todavía quedaba un ligero olor a humo y miedo en las calles del barrio porque, aunque estén «acostumbrados», el dolor de ver arder los alrededores de sus casas, les «parte el alma». Ya nada les sorprende. Solo quieren «vivir sin miedo a salir ardiendo», concluyeron.