Un regalo de Navidad para 'el Principito'

La programación de Radio sin Barreras se articula en podcast (normalmente emite los sábados de 12.00 a 14.00 horas, y los domingos de 18.00 a 20.00) y desde ella rompe lanzas a favor de la inclusión sin más yelmo que su ejemplo ni más artillería que sus locuciones, sus espacios que invitan a la reflexión y su música sin etiquetas. «No es una radio convencional. Mi objetivo es la destrucción de barreras para todo tipo de personas con discapacidad o en riesgo de exclusión social por cualquier motivo», explica Óscar. Su emisora está en su dormitorio y cumple este mes de diciembre cuatro años. Se llama así en honor al equipo de 'Outbarriers', que es una aplicación que ayuda a las personas ciegas a desenvolverse mediante balizas de geolocalización.

Para celebrar su aniversario, el joven ha dado uno de los pasos más importantes de su vida: pedir matrimonio a su chica a través de las ondas. Lo hizo este jueves y la respuesta de ella, Sonia, una joven de Almuñécar, se desveló al final del programa, como ocurre en los mejores relatos. Y fue un (redoble de tambor)... ¡Siiiiiií!

Óscar enarbola la bandera de los sentimientos cuando avanza en su discurso y habla de su afán de seguir subiendo peldaños. A él la vida le plantó una escalera delante cuando aún no sabía andar. Nunca ha visto la luz ni sabe de qué tono son los colores de ningún estandarte, pero es un príncipe irreal real: encarna a 'el Principito del Planeta Luz', un personaje ideado por el grupo Princesa de la Luz, que lideran la psicóloga coach motivacional Rosa Bastida y su hermana Susana. «Hay que concienciar a los niños y a los adultos en los valores, que son lo importante», afirma al explicar por qué se unió a este proyecto.

La ceguera ha hecho sentir muy de cerca en ocasiones a Óscar «el aislamiento», «la falta de empatía» y «la incomprensión». Incluso dentro de su propia familia. Pero él ha logrado arrinconar esas sensaciones y desarrollar otro sentido que muestra sin pudor: el de la pasión por todo lo que hace. Porque su horizonte vital es un pentagrama donde la ilusión, el trabajo y el amor son el do mayor. Porque, como decía su personaje 'tocayo' del escritor francés Antoine de Saint-Exupéry: lo esencial es invisible a los ojos. Y ciertamente, sólo se ve bien con el corazón.

Cuando el joven recibe a IDEAL en su casa es martes, 15 de diciembre, y llega acompañado de Ricardo Vicente Corredera, instructor de movilidad con perros guía de la Fundación ONCE. Está enseñando al animal los itinerarios de su nuevo amo. Halley (como el cometa) es una labradora de menos de dos años que relevará en su cometido a Saúl, el can que ha acompañado en los últimos años al 'Principito' y que se acaba de jubilar.

Saúl es blanco crema y Halley, negra, pero ese dato es irrelevante para Óscar, un defensor de que la apariencia física es lo de menos. Los dos son canes buenos, obedientes, medianos, peludos y suaves. «Lo principal es que los dos establezcan una buena relación y que se conozcan», resalta el instructor de la ONCE, que está convencido de que así será, porque «Óscar es alguien muy perfeccionista» y más pronto que tarde sus rutas diarias –y rutinas– serán pan comido para Halley.

Cuando el granadino narra sus aventuras y desventuras, las va entregando por capítulos. Habla por ejemplo de Fátima, del Grupo Axfito, de Tifloactiva... y dedica una reseña especial a quienes lo 'ordenaron' príncipe. «Óscar Linde es de esas personas que te dejan sin palabras. Un auténtico ejemplo de superhéroe anónimo que, a pesar de su discapacidad visual, no para de participar en multitud de nuevos proyectos y de ayudar a todo el que se cruza en su vida», expresa Susana. Es, según describe, independiente, generoso, noble, proactivo y muy inteligente, aparte de un creador compulsivo. «Es un ser de luz, 'el Principito del planeta Luz', un lugar donde no existen barreras, donde viven seres con capacidades extraordinarias. Óscar es de esas 'personas regalo' que quieres tener al lado para siempre. Un honor que la vida nos haya cruzado», confiesa Bastida.

El vídeo que protagoniza este 'Principito' de Albolote se grabó el 2 de enero del año pasado y sigue colgado en el canal de YouTube de Princesa de la Luz (https://www.youtube.com/watch?v=HF7JveRmZmA). Contiene una moraleja que no requiere actualización y que resume Rosa Bastida, en el papel de Princesa de la Luz, en esta frase: «la única discapacidad que existe es una mala actitud».

Sonia, que vive en Almuñécar, ya es la princesa de Óscar en la vida real. Coincidieron en la red por destino o casualidad y llevan juntos solamente tres meses. Ella le ha visto a él y él a ella... los dos, con el corazón. Ella, recalca Óscar, ha llenado sus «carencias» de una forma mágica. Aunque lleven tan poco saliendo, el tiempo siempre es relativo y más cuando dos almas gemelas tienen la suerte de tropezarse. Ahora la pareja seguirá escribiendo sus días. Con perdices o sin ellas, pero felices. Ha sido, como reconoce Óscar, su mejor regalo de Navidad. FIN.