Pierden dos abonos históricos de la Plaza de Toros por un supuesto «error informático» que el coso niega

Su saga posee desde hace 60 años varios asientos del Balconcillo Vomitorio del Tendido 3, que tiene una ubicación estratégica: se hallan justo debajo del balcón de la Presidencia. Pero este año, cuando se celebre la Feria del Corpus, solo podrán ocupar las localidades 3 y 4. La 1 y 2, que eran las de los abuelos de Eva y que su familia ha conservado 'in memoriam', han sido adquiridas por otra aficionada granadina a los astados.

Eva y su madre sostienen que se vendieron a una usuaria de otro tendido por un supuesto «error informático». Sin embargo, las fuentes de la Plaza de Toros de Granada consultadas por IDEAL aseguran que los abonos no fueron renovados dentro del plazo legal establecido (del 9 al 15 de mayo) y por eso figuraban como libres y se vendieron a otra persona.

El desconcierto y la indignación se apoderaron entonces de madre e hija, que han movido cielo y tierra sin éxito. Consideran que es un atentado a la memoria de sus abuelos, Antonio Ramírez y Presentación Carmona. «No ir al sitio de mis abuelos es como sentir que les falto el respeto a ellos y a mi tío», expresa Eva.

Eva ha contactado con la plaza varias veces, ha llamado a Consumo y ha pedido por ventanilla la hoja de reclamaciones (en un primer intento sin éxito, aunque este miércoles, 1 de junio, el coso afirmaba que tenía el documento a su disposición).

Lo único que han logrado Eva y Carmen ha sido garantizar, a fecha 16 de mayo (un día después de expirar el plazo de renovación para las corridas de este año), que en 2023 volverán a sentarse en sus sitios de toda la vida del Tendido 3 a la sombra.

Los abonos figuran a nombre de un primo de Eva y a ese mismo nombre ya los tienen asegurados para el año próximo, pues la plaza, tras no lograr recuperar las localidades 1 y 2 para reintegrarlas a la familia Ramírez este Corpus, les garantiza que les han restituido la titularidad cara al siguiente.

El coso asevera que ha intentado en los últimos días que los abonos vuelvan a los Ramírez pero no ha sido posible. «La hemos llamado varias veces (a la compradora). La primera nos cogió el teléfono y las siguientes, no».

Así las cosas, este año Carmen tendrá que sentarse junto a dos personas que normalmente ocupaban otro tendido. Y Eva y su pareja se plantean hasta no acudir para no pasar un mal rato. «Voy a luchar por lo que es mío, aunque no vaya», comenta Eva, tras recordar que su abuelo falleció con 53 y su abuela con 71, y que ella y su madre disfrutan de los asientos 1 y 2 de ese balconcillo «desde 1996».

Dada la estrecha relación de los Ramírez con la Monumental de Frascuelo, habrá quien se pregunte cómo no tuvo la Plaza de Toros la deferencia de avisarles o reservarles los abonos al ver que había vencido el plazo sin renovación. «Ha habido este problema porque ellos no han venido a retirarlos en su período de renovación», insisten desde el coso, para subrayar que «con los datos informáticos está todo correcto». Además recalcan que ellos no tienen por qué avisar a nadie. «La gente viene corriendo a retirar su abono porque sabe que esto en las taquillas de los toros pasa».

Las alternativas que la Plaza de Toros ha dado a Eva no han sido bien acogidas. Le ofrecieron otro lugar para presenciar las corridas previstas entre los días 16 y 19 de este mes. Incluso le plantearon poder estar «en el callejón», donde se sitúan los apoderados, el médico y los empresarios, según la afectada. Pero no. Eva se resiste a romper la tradición por una maniobra comercial que no llega a comprender. Sobre todo porque es de sobra conocido en el mundillo taurino de Granada que ese balconcillo ha sido toda la vida de los Ramírez.

Ella y su familia quieren disfrutar de las faenas de El Fandi, Manzanares, Roca Rey, Morante, Cayetano, Pablo Agudo, El Juli, Talavante y Tomás Rufo, así como de la Corrida de Rejones del domingo, pero desde donde tradicionalmente lo han hecho. Como siempre. Como de costumbre.