El peligroso cruce en el centro de Granada que provoca varios accidentes al año

Un punto que no suele ser problemático para quienes conocen la zona pero en el que, sin embargo, se suelen producir varios accidentes graves a lo largo del año. El último de ellos tuvo lugar el pasado día 21 de marzo, cuando una persona resultó herida tras la colisión entre una motocicleta y un coche al girar este último para cruzar hacia Agustina de Aragón e impactar contra el vehículo de dos ruedas. Una situación que suele repetirse con frecuencia.

Así lo confirma la Policía Local de Granada, que tras la consulta realizada por IDEAL sobre los percances ocurridos en el cruce en los últimos años, ha detallado el número de accidentes graves y los principales motivos por los que tienen lugar. «La mayoría tienen que ver con extranjeros que están visitando la ciudad con un coche de alquiler y utilizan el GPS», cuentan desde la Policía.

De hecho, es el propio GPS el que confunde a los conductores ya que, a pesar de que para poder realiar el cruce primero hay que incorporarse al carril derecho y esperar a que el semáforo permita circular, el sistema de navegación indica directamente que se gire a la izquierda. Esto ha provocado que desde el Área de Movilidad del Ayuntamiento de Granada realicen una inspección y gestionen con Google una solución para poner fin a esta situación.

Según fuentes policiales, el motivo principal de los accidentes de ese cruce no es otro que el giro inesperado de vehículos. Y, pese a que consideran que la zona está bien señalizada, desde Movilidad ya trabajan para informar del cruce con mayor antelación y evitar así que se produzcan más choques en la zona.

En cuanto al número de accidentes graves producidos en los últimos dos años, detallan que de los cinco que han tenido lugar cuatro de ellos han sido provocados por conductores que no son de Granada, llegando a causar heridos graves en alguno de los casos. Mientras que el restante tiene que ver con un vehículo conducido por una persona bajo los efectos del alcohol, lo que propició que no viera la señalización del giro.