La obra del Palacio de Congresos se hará hasta de noche para terminar en un año

La obra llega tres años después de que se anunciaran estas ayudas europeas (fondos Pirep) enfocadas a conseguir edificios más eficientes. La Consejería de Fomento ha licitado en un mismo lote y de urgencia tanto la redacción del proyecto –que se hará en dos meses– como la obra en sí. El proceso tiene un plazo total de ejecución de un año. El 14 de febrero es la fecha límite de presentación de ofertas por parte de las empresas interesadas.

La modernización del Palacio implica la renovación de sus tripas. Es decir, habrá que cambiar el sistema de climatización y por tanto, las calderas, de un edificio gigante que no parará su actividad. De hecho, según las previsiones del Palacio de Congresos, este 2025 será un año de récord en cuanto a la acogida de congresistas –con un encuentro médico de gran relevancia para 5.000 personas– o una cumbre mediterránea de transcendencia política y mediática.

Para el director del Palacio de Congresos, Paco Barranco, la llegada de estas obras es algo «muy satisfactorio» que les hace mirar al futuro con ilusión y perspectiva. Se trata de «una transformación muy necesaria» que modernizará el edificio y que abrirá la puerta a ser más competitivos.

El palacio granadino tiene, durante este año, pocas fechas libres disponibles, por tanto, desde la empresa gestora confían en la buena coordinación por parte de las administraciones y de la empresa que ejecute la obra para que este edificio pueda continuar con su intensa actividad, que revierte en el desarrollo económico de Granada.

El pliego advierte que algunos de los trabajos de las instalaciones pueden ser incompatibles con la actividad normal del Palacio y que, por tanto, se debe dar «prioridad» a este funcionamiento de los actos programados en el edificio. Cuando la dirección estime que no es posible realizar las obras en paralelo a los congresos y eventos, los trabajos se deberán realizar en horario nocturno, según recoge el pliego que ha sacado a licitación la Junta de Andalucía. La empresa que ejecute las obras tendrá que contemplar en el coste las acciones que se tengan que llevar a cabo por las noches.

Los trabajos deberán hacerse, además, con celeridad ya que tendrá que estar terminados en marzo o abril de 2026, por lo que no habrá tiempo que perder y tendrá que compatibilizarse la obra con un Palacio a pleno rendimiento que no cerrará sus puertas.

La consejera de Fomento, Rocío Díaz, indicó que «con esta inversión se va a acometer una remodelación sin precedentes en este edificio». «Estas obras serán determinantes para revitalizar un motor económico de Granada como es nuestro Palacio de Congresos», añadió Rocío Díaz, que está convencida de que esta intervención «supondrá un salto de calidad que reforzará la posición de la ciudad para acoger grandes eventos, como ocurre con la próxima celebración de los premios Goya».

La alcaldesa de Granada y presidenta del Consorcio del Palacio de Congresos, Marifrán Carazo, indicó que este paso es «absolutamente definitivo» para que arranque «la mayor inversión realizada en su historia». «Va a actualizar el estado del edificio y a aportar eficiencia en su gestión», manifestó la alcaldesa.

Carazo señaló que va a ser una inversión clave en un momento más importante para el Palacio, «por eso debe de ser tractora para traer nuevos congresos, eventos, para también atraer actos culturales». «Esto fortalecerá el posicionamiento de Granada como ciudad organizadora de grandes eventos, congresos, pero también para acompañar en el camino que está trazando de ser Capital Europea de la Cultura en 2031», apuntó. La presidenta del Consorcio resaltó que se trabajará para ejecutar la obra y hacerla compatible con la gestión del Palacio.

Los trabajos buscarán reducir al menos el 30% de energía no renovable en el edificio y mejorar la accesibilidad en los diferentes recintos. Entre las obras previstas en materia de eficiencia energética está la sustitución de los equipos de climatización por bombas frío-calor y del sistema de generación de agua caliente por bombas de calor de alta eficiencia.

También se ampliará la colocación de plantas fotovoltaicas en las cubiertas principales y se mejorará la envolvente térmica del cubo de cristal en la entrada. De igual forma, se reducirá el consumo energético mediante la sectorización de zonas comunes y zonas de comunicación entre plantas. La accesibilidad se adaptará a la normativa vigente.

Uno de los protagonistas de esta actuación será el cubo de cristal, que tiene ahora importantes problemas. En especial, el acristalamiento que produce un efecto invernadero, con temperaturas extremas en la parte superior. Además tiene goteras y los elementos metálicos oxidados. Para repararlo se prevé la colocación de vidrios de baja emisividad y control solar, así como la colocación de un sistema opaco en cubierta. Esta actuación vendrá acompañada por la colocación de cortinas de aire en los accesos principales al edificio.