«Interpretar a Paquirri me abrió el corazón y la mente a la tauromaquía»

1.– ¿Cómo despegó su carrera?

–Fue una conjunción de varios proyectos. Una carrera es muy difícil de hacer y se trata de estar en el sitio adecuado y que el personaje esté para ti. Quizá fue con el personaje de Paquirri, porque todo el mundo lo conocía y sabía dónde estaba aquel fatídico día que murió.

2.– ¿Le gustan los toros?

–Antes de ese proyecto no tenía mucha idea. La tauromaquia lo tiene complicado en ciertos aspectos, pero cuando conocí ese mundo de lleno me abrió el corazón y la mente. Entendí y respeté mucho más al torero y al animal.

3.– ¿Se ha acomodado a las series?

–Empecé en teatro, pero el lenguaje de la cámara me encanta. Las series tienen el hándicap de que, si funcionan, las cadenas las van estirando y no sabes muy bien el camino que va a coger tu personaje. Pero en esta profesión, tener trabajo –ya sea teatro, cine o ficción– es una bendición para cualquier actor.

4.– ¿Cómo le afectan los 'noes'?

–Son un empuje para seguir luchando. Ha habido muchos y creo que son los que construyen una carrera. Los 'noes' son la gasolina de la interpretación.

5.– Interpreta personajes atractivos. ¿Va de galán por la vida?

–No (risas), sería muy cretino. He tenido esa vinculación a personajes muy de campo, que de alguna forma estaban en mi línea artística. Muchas veces, el físico condiciona a la hora de elegir a un actor, pero que te digan que te eligen por tu valía en la interpretación es un premio.

6.– ¿Cuántas horas pasa en el gimnasio?

–El físico es importante mantenerlo, sobre todo si el tipo de papeles para los que te cogen lo exige. Una caída de un caballo se lleva mejor si estás fuerte, así que al final, estar potente –no en sentido vanidoso– es mejor.

7.– También ha interpretado a un personaje homosexual en una producción mexicana. ¿Faltan papeles LGTBI en el cine?

–Absolutamente. En España, en Europa y en el mundo. Ocurre como con los personajes femeninos, que siempre han estado más oprimidos. El amor es libre y da igual de cómo y de quién te enamoras. La gente necesita cada vez más esas historias.

8.– La escena que más le cuesta rodar.

–Se va a reír, pero son las escenas de comida. Soy más de acción y por cuestiones de 'racord' tienes que comer poquísimo. Un puchero a las seis de la mañana igual no te entra (risas).

9.– ¿Para cuándo el salto internacional?

–Todos estamos abiertos a eso, pero gracias a las plataformas ya se están abriendo al mundo los proyectos en castellano. El público cada vez ve más versión original.

10.– 'Las chicas del cable' ha sido todo un fenómeno de masas. ¿Es feminista?

–Sin duda. Además, mi personaje del inspector Cuevas era casi una más dentro de esas chicas del cable.

11.– ¿Ha ganado fama gracias a la plataforma?

–Tienes más visibilidad y te llegan mensajes de todas partes del mundo. Al final, nosotros trabajamos para el público. Sin ellos no somos nada.

12.– ¿Qué le queda por hacer?

–Siempre tengo la sensación de que estoy empezando (risas). Tengo una película y dos proyectos de serie y me apetece darles forma.

13.– ¿Dejaría la interpretación por la dirección?

–No. Además, no me veo capacitado para dirigir. Sí sería maravilloso poner un proyecto mío en manos de un director.

14.– Se acerca a los 40. ¿Le asustan?

–De momento, no (risas). Tengo 38, pero lo veo como algo lejano. Ahora me siento con la fuerza de los 20, pero con la madurez que conlleva haber llegado hasta aquí.

15.– ¿Qué fue lo más complicado para llegar?

–Tuve un momento de crisis cuando llegué a Madrid y me volví a Granada. La capital es despiadada para vivir. Tuve que hacer de mil cosas antes de trabajar como actor, pero esos años hacen que te formes y respetes la profesión.

16.– ¿Existe el complejo andaluz?

–Yo nunca lo he llegado a sufrir. Ser andaluz es ser muchas cosas. La condición de luchadores está impregnada en nosotros y eso juega a nuestro favor. Sólo hay que mirar el talento que hay en Andalucía...

17.– ¿Qué le parecen las producciones de su tierra?

–Una maravilla. En Andalucía tenemos tanto que contar… Echo de menos más rodajes, porque Madrid tiene mil escenarios, pero no tiene nada que hacer frente a la Alhambra o los jardines de Sevilla.

18.– Lo primero que hace cuando va a Granada.

–Lo primero, venir a mi pueblo, Pinos del Valle. Intento pasar siempre que puedo. La gente le llama vacaciones, nosotros paro (risas), y hay que optar por la economía de guerra. Estar en casa de tu madre y con los tuyos.

19.– Sus pasiones fuera de cámara.

–El campo y los caballos. Junto a mi familia, son mi cable a tierra, muy importante en la vorágine de 'flashes' y alfombras rojas.

20.– Lugar favorito de Andalucía.

–Es tan maravillosa que no sé donde elegir. Barreré para casa y diré el Valle de Lecrín, creo que es un lugar por descubrir.