Incautan por primera vez en Granada 'cocaína rosa', conocida como la droga de los ricos

La cocaína rosa tiene efectos parecidos a otras drogas sintéticas con una sensación de inhibición y bienestar a base de alucinaciones . Pero es engañoso. Los estudios avisan que el consumidor puede sufrir desde mareos a taquicardias pasando por subida de la tensión, ansiedad, convulsiones, delirios o psicosis. Entre las consecuencias más graves de esta droga hay pacientes que han entrado en coma o han acabado con arritmias cardiacas. Esta es la consecuencia de mezclar LSD, un alucinógeno, con MDMA o éxtasis; curiosamente, esta droga pese a su nombre, no lleva entre sus componentes cocaína.

«Nosotros no tenemos en tratamiento a ninguna persona afectada por la adicción a este tóxico. Es muy potente porque mezcla un alucinógeno con un estimulante eufórico como es la metanfetamina», apunta Manuel Mingorance, director del centro de tratamiento de adicciones Proyecto Hombre.

La cocaína rosa también es conocida como la 'droga de los ricos' por el elevado precio del gramo de esta sustancia que suele oscilar entre los 80 y los 100 euros, frente al gramo de cocaína que en estos momentos se encuentra a un precio de 60 euros el gramo.

El consumo de estas sustancias cada vez se traslada más a perfiles de usuarios con cierto poder adquisitivo o a 'niños de papá' con dinero suficiente para adquirir esta y otros estupefacientes.

Las personas con cierto estatus que se han visto 'enganchadas' al consumo de drogas cada vez son más. «Proyecto Hombre dispone de un programa nocturno de tratamiento donde lo más frecuente es encontrar ejecutivos, funcionarios, trabajadores de la banca o gente que trabaja bajo mucha presión y se evade con la cocaína» . La cocaína le da el relevo a la cocaína rosa como la droga más cara.

Las principales operaciones policiales contra esta droga se han localizado en zonas como Ibiza, Marbella, Málaga yMadrid, principalmente. «Esta droga es un cóctel molotov, porque mezcla las alucinaciones con la euforia y eso es una bomba demasiado peligrosa», concluye el director de Proyecto Hombre.