Hosteleros de Plaza Nueva denuncian cortes de luz en hora punta

«A mí ya se me han quemado varios motores que he tenido que pagar de mi bolsillo», explica Amourad, dueño del restaurante El Darro, en la calle Pan. Tanto él como el resto de comerciantes de la zona admiten estar hartos ante una situación que según ellos ya debería estar solucionada desde hace tiempo. «Hemos tenido dos años de pandemia con poca gente y ahí se podría haber abierto la Calle Elvira para renovar la instalación, ahora es mucho más complicado», reclama Trinitario, el dueño del Hotel Plaza Nueva.

La situación, reclaman, es por culpa de los generadores que tiene la zona. Ahora en verano se producen sobrecargas en las horas punta que hace que se fundan fusibles y hace que no puedan tener todos los electrodomésticos en funcionamiento. Endesa tiene preparado un retén en los alrededores de la empresa Melfosur, pero al estar de guardia, no pueden únicamente atender los problemas de este barrio. «Si les surge un problema en cualquier pueblo de Granada ya puedes estar horas hasta que lleguen a arreglarlo, y todo ese tiempo sin poder trabajar», reclama Joaquín, uno de los dueños del restaurante León.

El martes pasado fue el día que más incidencias se reportaron, justo en un día festivo donde hay más acumulación de clientes. «Es muy complicado tener que decirles a una mesa que no puedes atenderles porque no tienes luz», lamentan desde los establecimientos afectados. «Ese día tuvo que quedarse mi padre toda la tarde hasta que arreglaron el problema para poder apagar algunos electrodomésticos», explican desde el León. Porque cuando se producen los cortes, los objetos electrónicos se pueden ver afectados. «No nos podíamos ir a casa y que cuando volviese la luz se quedase encendido el aire acondicionado toda la noche, que la luz la siguen cobrando».

Los establecimientos llevan dos semanas con cortes continuos y las incidencias son relativamente sencillas de reparar, el problema es la disponibilidad. El Hotel Plaza Nueva puso ocho incidencias durante la semana pasada y ya han llegado a poner una reclamación formal. Yolanda, dueña de El Mercader, se queja de que está harta de hablar máquinas. «Cuando llamas y metes tus datos siempre dicen que no hay ninguna incidencia y que el técnico tienes que pagarlo de tu bolsillo. Yo siempre voy diciendo si pero solo para que me pongan con una persona».

«Hay restaurantes que viven de las reservas y tienen que cancelarlas porque no hay luz», expresan disgustados. En el hotel reclaman que hay clientes que se han quedado encerrados en los ascensores y hay muchas quejas por culpa del aire acondicionado. «Para un visitante de fuera es inconcebible estar sin refrigeración», explica Trinitario. Otros muchos huéspedes lamentan estar en su habitación a horas a las que es imposible estar en la calle pero sin poder refrescarse dentro. Y los empleados se ven obligados a subirle las maletas a los clientes en muchas ocasiones al no funcionar el elevador.

Todos los comerciantes de la zona coinciden en que necesitan encontrar alguna solución, pero la ven muy lejana. «Aquí en las horas punta necesitamos mucha potencia pero vienen por un sistema muy deteriorado». La solución actual de tener al retén apostado no contenta a nadie, pero la opción de arreglar la instalación obligaría a abrir el suelo en Calle Elvira, una solución que será difícil de ejecutar.

Desde Endesa transmiten a este periódico que ahora mismo no tienen datos sobre las incidencias que se reclaman, pese al retén que está por la zona de vez en cuando. En la empresa no han hecho aún una valoración de la problemática en esta zona, mientras los empresarios esperan una respuesta a las reclamaciones interpuestas.