Los hosteleros cortan durante unos minutos la autovía al final de su manifestación

Es el tercer aviso de los hosteleros granadinos: quieren trabajar, se reivindican como espacios seguros y entienden las restricciones, pero exigen ayudas directas para compensar los cierres. Empresarios y trabajadores de Granada han vuelto a salir a la calle en la mañana de este viernes para pedir a las tres administraciones soluciones, un rescate con ayudas directas para el sector «que da de comer a Granada».

La asistencia ha sido algo menor que la de la última protesta. Según fuentes de la Policía Local se han concentrado alrededor de 5.000 personas y 60 vehiculos. Los organizadores han tenido que pedir que se mantengan las distancias de seguridad entre los convocados.

El presidente de la Federación Provincial de Empresas de Hostelería y Turismo, Gregorio García, cree que las ayudas anunciadas hasta ahora por la Junta no son suficientes ni llegarán a todos los perjudicados por el cierre de un sector que genera 15.000 empleos directos en Granada. Aceptarán la posible prórroga de las restricciones este domingo, aunque piden una relajación de las medidas para igualar a Granada con el resto de las provincias. Proponen una apertura escalonada hasta la tarde, o que al menos les permitan que los clientes puedan recoger en los locales.

El alcalde, Luis Salvador, y el concejal de Movilidad, César Díaz, les han acompañado hasta la Plaza del Carmen. A diferencia de las dos movilizaciones anteriores, ni el delegado de la Junta, Pablo García, ni la subdelegada del Gobierno, Inmaculada López Calahorro, se han asomado a sus respectivas sedes al paso de la protesta. A la llegada al Ayuntamiento, uno de los hosteleros se ha tumbado en el suelo frente a la pancarta «sin ayudas nos arruinan» para simbolizar la muerte a la que, dicen, está encaminado el sector si no logran un rescate.

La misma imagen se ha repetido en la autovía. El 'salto' a la A-44 ha generado un instante de tensión entre manifestantes y Policía Nacional, cuando algunos de ellos, antes de recibir el visto bueno de los agentes, han intentado retener el tráfico. Luego, la marcha ha transcurrido sin incidentes entre las salidas de Neptuno y Méndez Núñez. En la rotonda se ha disuelto la manifestación, entre aplausos. Los hosteleros hablan de movilización histórica y esperan que las administraciones muevan ficha, ya que Granada es la única provincia andaluza en la que sus negocios están cerrados.