Granada registra un aumento «alarmante» de las infecciones de transmisión sexual
En los últimos seis años los casos declarados de clamidia se han multiplicado por siete, los de gonorrea, por cinco,y los de sífilis, por dos
Inés Gallastegui
Granada
Lunes, 17 de febrero 2025, 00:03
Granada registra un aumento «alarmante» de las infecciones de transmisión sexual (ITS), según reconoce el responsable del Plan Andaluz ITS, VIH y Sida (Paitsida) 2023- ... 2030, Javier de la la Torre, en declaraciones a esta redacción. Según los últimos datos facilitados por la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía –que aún son provisionales–, los casos de clamidia registrados en la provincia aumentaron en 2024 un 46% respecto al año anterior; los de sífilis, un 35%; y los de gonorrea, un 16%. Y no se trata de un incremento puntual, sino de una tendencia sostenida: esas infecciones han registrado un aumento del 759%, 183% y 491% desde 2018, respectivamente.
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Granada es una de las provincias andaluzas donde más crecieron estas infecciones el año pasado: ocupa el segundo lugar, solo por detrás de Huelva, en clamidia (1.091 casos) y gonococo (816), y el tercero tras Huelva y Málaga en sífilis (306). Si se tiene en cuenta la población, las cifras son aún peores, ya que Granada registra las tasas más altas de Andalucía de ITS, con la única excepción de la sífilis en Málaga, ligeramente superior. De hecho, en Granada se han producido el 16% de las ITS de la comunidad, pese a que tiene algo menos del 11% de la población de la región.
«Las ITS son infecciones cosmopolitas, más frecuentes en zonas costeras y en ciudades que en el mundo rural», resalta el médico, quien también resalta que Granada es una de las provincias donde las técnicas de diagnóstico están más avanzadas, lo que también puede influir en que se registren más casos.
No siempre son infecciones banales: pueden producir cáncer, abortos e infertilidad
El doctor De la Torre admite que la expansión de estas infecciones quizá no es tan espectacular como sugieren estas cifras y se debe, en parte, a una mejora de los sistemas de detección con la nueva estrategia de abordaje de estas patologías.
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«Antes, cuando se consideraban infecciones banales, no se declaraban –explica el facultativo de Medicina Interna del Hospital Costa del Sol–. Con el nuevo plan, se ha dotado a los centros de atención primaria de técnicas microbiológicas para realizar el diagnóstico y hay consultas específicas de ITS en todos los hospitales de especialidades». En ellas los usuarios reciben atención de los servicios de Enfermedades Infecciosas, Urología, Ginecología o Dermatología, en función de las necesidades de los pacientes.
Jóvenes varones
El responsable de Paitsida resalta que el registro de las ITS ha crecido de forma constante en Andalucía, desde 1.769 en 2013 hasta 12.727 en 2023. En 2024 fueron un total de 14.555, aunque las cifras están pendientes de revisión. «Después de la pandemia ha habido un crecimiento exponencial», admite De la Torre, quien resalta que el colectivo más afectado son los hombres jóvenes que mantienen relaciones sexuales con otros hombres, excepto en el caso de la clamidia, donde la afección es equiparable en hombres y mujeres, especialmente en el tramo de 20 a 25 años.
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El médico subraya que estas tres ITS «son curables», ya que existe tratamiento antibiótico eficaz para combatirlas, a diferencia de lo que ocurre con el herpes genital –causado por virus–, con un incremento del 26% en toda Andalucía y un total de 934 casos registrados en 2024.
«Más de la mitad de los casos de esas tres ITS son asintomáticos, pero eso no quiere decir que no produzcan daño: infertilidad, abortos, cáncer genital y cáncer anal, entre otros. No es como para menospreciarlas», subraya el experto, quien alerta del riesgo de no dar importancia a estas infecciones y adquirirlas de forma recurrente, ya que las bacterias que las causan pueden acabar volviéndose resistentes y hacer ineficaces los antibióticos. Ya está ocurriendo con la gonorrea: «Empieza a haber casos de gonococo resistente y corremos el riesgo de quedarnos sin tratamiento curativo».
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«Estamos preocupados –reconoce–. Estas infecciones muchas veces se curan con unas pastillas o con una inyección, pero a veces se complican. He visto patologías complicadas, tanto en hombres como en mujeres».
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