La subestación eléctrica de Baza se inauguró en 2022 junto al primer tramo de la línea 400 que ahora está pendiente del segundo tramo, Baza-Antas. Ramón L. Pérez

Granada tiene pendientes obras por más de 160 millones para reforzar su red eléctrica

La línea Saleres-Íllora, la infraestructura clave para garantizar el suministro en el sur de la provincia, lleva año y medio atascada en la tramitación ambiental

Sábado, 12 de julio 2025, 00:15

Son bastante desconocidas e invisibles para el ciudadano de a pie, pero las infraestructuras eléctricas son tan necesarias que si faltan pueden lastrar el desarrollo ... de un territorio incluso más que una autovía o un tren. Si algo han aprendido los españoles a raíz del gran apagón es que la malla eléctrica de todo el país es frágil y la de Andalucía oriental –con una densidad un 40% inferior a la media peninsular– bastante más deficitaria. La red de transporte eléctrico tiene un 'agujero' en la provincia de Granada que arrastra un histórico déficit de inversión.

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Cada cuatro años, el Gobierno aprueba una planificación eléctrica con las infraestructuras de obligatoria construcción para ese periodo, de manera que acompañen el desarrollo de los territorios. La planificación vigente, 2021-2026 contemplaba 286 millones de euros en obras para reforzar las autopistas y el sistema eléctrico de la provincia. La de mayor magnitud, con más de 88 millones de inversión y que más condicionaba el desarrollo económico de Granada, es la línea de alta tensión entre Caparacena y Baza. La infraestructura es una realidad desde noviembre de 2022, cuando se inauguraba con un retraso de 16 años y un despliegue de cargos públicos, encabezados por el presidente del Gobierno y el de la Junta, para celebrar la llegada de la luz al desierto energético de España, el norte de Granada.

Pero en esa hoja de ruta se contemplaban otras infraestructuras que también son fundamentales para paliar el déficit eléctrico de la red de Granada, que deberían estar puestas en servicio en 2026 y sin embargo siguen en tramitación administrativa.

Una vez operativo el primer tramo de la línea 400, la prioridad para completar la red de la provincia, y así lo considera la propia Red Eléctrica, la empresa responsable de la operación y el transporte del sistema eléctrico en España es la subestación de Saleres y la línea Saleres-Íllora, que supondrán una inversión de 56,3 millones de euros, según la planificación de Red Eléctrica. El proyecto contempla la construcción de la nueva subestación Saleres 220 kV con conexiones con Íllora, mediante una nueva línea de unos cuarenta kilómetros y la unión con la línea ya existente Gabias-Órgiva. La infraestructura es vital para mejorar la seguridad del suministro eléctrico en el sur de la provincia de Granada. Permitirá descargar la subestación de Órgiva, que está saturada, y reforzará de forma general la red de distribución para garantizar tanto la implantación de posibles nuevos proyectos empresariales como el suministro de la población en general.

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Nuevo trazado

Esta futura línea es también la que tendrá que abastecer el consumo de energía del acelerador de partículas del Ifmif-Dones, un dato que lo dice todo sobre su importancia. Sin embargo el proyecto acumula un historial de problemas.

La línea de Saleres entró por primera vez en la planificación nacional en el año 2015 y se paralizó por el rechazo social que suscitó el trazado que atravesaba el Valle de Lecrín. A finales de 2019 el procedimiento administrativo para lograr la autorización ambiental caducaba sin lograr salir adelante. El Gobierno y Red Eléctrica rescataron la línea en la planificación vigente, 2021-2026, pero con un diseño mucho más simplificado que pretendía precisamente allanar el camino en la tramitación. La entrada en funcionamiento del primer tramo de la línea 400, en 2022, permitió reconfigurar el trazado de esta otra con un recorrido de mucho menor impacto. El proyecto entró en enero de 2024 en la consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente. Un año y siete meses después, el proyecto de la línea 220kV de Íllora a Saleres ha entrado en fase de información pública y consultas y el de la subestación va un paso por delante, ya que tiene superado este trámite y está pendiente del último dictamen favorable. Un informe que, según fuentes de Red Eléctrica, están deseando recibir para poder iniciar las obras. Desde la propia consejería de Industria, Minas y Energía de la Junta han sido muy reivindicativos con Red Eléctrica para que ponga en marcha las inversiones pendientes para acabar con la sombra eléctrica que se cierne sobre Granada.

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