El Gobierno perfora a 400 metros bajo el suelo en Albolote en busca de nuevos pozos por la sequía

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha realizado ya, con autorización de su propietario, cuatro perforaciones en un terreno privado localizado aproximadamente a un kilómetro y medio al norte de la cárcel de Albolote. Estas perforaciones se han hecho a 400 metros de profundidad, creando orificios de 254 milímetros de diámetro , entre los meses de septiembre y octubre.

Según explican los técnicos de la CHG, la perforación se ha realizado mediante el método de rotopercusión, es decir una perforación ordinaria de los equipos que se basa en el impacto y que suele emplearse en terrenos muy duros y semiduros. Los técnicos han procedido también a la entubación metálica de estos orificios para proteger el agujero descubierto de los fluidos, las presiones, derrumbes y los problemas de estabilidad del pozo.

Del mismo modo, se han realizado ensayos de bombeo en cada uno de los pozos para medir la recuperación del nivel del agua por si en un futuro hubiera una explotación continua y así comprobar que en esa zona el acuífero puede soportar la extracción de unos caudales determinados.

Se han tomado muestras del agua para comprobar su potabilidad, y se está redactando un informe final en el que se expondrán los resultados obtenidos en cuanto a cantidad y calidad del agua. El organismo propondrá futuras actuaciones en el caso de que los resultados sean positivos.

Si las conclusiones finales lo aconsejan, la siguiente fase sería construir los pozos que el estudio determine, definiendo su profundidad. Estas reservas de agua se enlazarían con una tubería hasta la estación potabilizadora o a tuberías existentes de agua sin tratar para llevarla el caudal a la estación. Antes de perforar y para encontrar nuevos pozos o reservas de agua, los técnicos recurren al Plan Hidrológico de la Cuenca, que limita los acuíferos o masas de agua subterránea existentes y estiman sus recursos, basándose en estudios geológicos y en datos previos de sondeos, pozos, manantiales o cursos de agua.

Con esta información se calcula el volumen teórico de agua que puede contener el acuífero, cuánta aportación recibe y de cuánta agua se puede disponer. Es a partir de estos planes donde se tiene conocimiento de los acuíferos que tienen recursos explotables. A partir de ahí se puede hacer un análisis hidrogeólogico más concreto de las áreas con mayor necesidad de agua y definir la zona a investigar. Las perforaciones en la búsqueda de agua pueden llegar a más de 1.000 metros de profundidad, aunque no es habitual.

Por su parte, la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) demanda para Granada que se ponga en marcha las obras para el terciario de la Vega, para poder regarcon aguas regeneradas.