Las novelas son para el verano

El feminismo de 'Jane Eyre'

REMEDIOS SÁNCHEZ

Martes, 27 de julio 2021, 00:28

En las tardes de calor de verano de un pueblo de provincias las horas se alargan hasta puntos insospechados. Tienes quince años, son las cuatro ... de la tarde y, desde el almendro más cercano, las cigarras acrecientan una sensación térmica de absoluto bochorno. La casa duerme la siesta, todos duermen. Es en ese momento en que no se sabe bien qué hacer cuando recuerdas aquel libro de pasta dura que te regaló tu tía hace unos meses, cuando el curso escolar no permitía diversiones.

Publicidad

Vas a buscarlo a la estantería sin saber bien si te interesa o no, pero es tal la monotonía, que su portada azul y las ilustraciones de un caballero y una dama decimonónicos, tan elegantemente vestidos, llaman tu atención. Parece otro mundo. El título, 'Jane Eyre' (una autobiografía), es atrayente. A la autora no la conoces; se llama Charlotte Brönte. Crees recordar que la profesora de inglés, doña Joaquina, mencionó ese apellido en clase… pero tal vez se llamaba Emily. Lo mismo es que es un apellido común inglés, como el Sánchez aquí, pero suena raro.

Veamos cómo empieza: «Aquel día no podríamos salir a pasear de nuevo. Por la mañana habíamos dado una vuelta por el desolado jardín, pero a la hora de comer —que solía ser temprana, cuando la señora Reed no tenía invitados a su mesa— aquel cierzo tan frío de por la mañana trajo unos nubarrones negros y espesos que se convirtieron en una lluvia helada, persistente y tenaz. Yo estaba encantada, mientras que para los demás aquello significaba una contrariedad». Desde el principio empatizas con la protagonista, con Jane, un personaje que va avanzando desde una desgracia a otra mayor, pero que, con su fortaleza de ánimo, se va sobreponiendo a todas. Retrata la realidad de una niña huérfana que pasa de vivir con una tía que la maltrata (la señora Reed), a un orfanato, Lowood, donde el hambre y las calamidades la rodean, donde ve de cerca la muerte y la resignación de otras compañeras, como su amiga Helen Burns. Pero no se rinde nunca, sigue esforzándose y se prepara para lograr una posición económica independiente en la vida (aquí el feminismo militante) apropiada las chicas jóvenes de su clase en la Inglaterra victoriana: ser maestra.

Lo logra y empieza como profesora en la escuela local, pero tras la boda de la Srta. Temple (la docente que la ha motivado y animado), el destino acaba llevándola a convertirse en la institutriz de Adèle Varens, otra niña huérfana, que vive en una casa de campo, Thornfield, rodeada de criados, pero sin que su tutor, un tal señor Rochester que la visita ocasionalmente, muestre demasiado afecto por ella.

Desde el principio la casa resulta un espacio cargado de misterio: se oyen gritos y risas extrañas de las que acusan a una de las criadas, la única que tiene acceso a una habitación cerrada con llave. La trama avanza cuando Jane conoce a Rochester, éste habita durante algún tiempo la finca con sus invitados de la alta sociedad –y se producen más acontecimientos inexplicables en Thornfield– y ambos se enamoran hasta tal grado que, a pesar de la diferencia socioeconómica, que era un obstáculo casi infranqueable en aquel tiempo, deciden casarse por amor. Pero nada puede resultar tan fácil y, estando en la iglesia, en el momento culmen previo a pronunciar los votos, se produce un suceso que motiva a Jane a huir, aun estando perdidamente enamorada. Su marcha conllevará nuevas aventuras, más peripecias y sufrimiento que la llevan a descubrir quién es en realidad, su verdadera condición, y a tomar de manera autónoma (otra rareza en las mujeres de la época) la decisión clave de su vida.

Publicidad

Con una prosa demorada, preciosista en el detalle y ágil en los momentos esenciales, Charlotte Brontë, una de las dos hermanas de la famosísima Emily (la autora de 'Cumbres borrascosas') desarrolla una historia argumentalmente bien construida que refleja las contradicciones de la sociedad victoriana. No defraudará a las adolescentes que, como aquella quinceañera, inician su andadura de amor por las letras. Tampoco a cualquier lector/a que busquen pasar un rato entretenido rescatando a una escritora que merece mayor protagonismo del que le ha dado la Historia de la Literatura.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad