«Es un estilo de vida muy diferente al de la Alpujarra»

Juan es conductor de limusinas, aunque en Australia este concepto va un poco más allá. «Aquí llamamos «limousine» al coche largo que conocemos en España y también al taxi de lujo. En ellas llevamos a directivos de empresas, celebrities o novios e invitados de bodas», explica el granadino, que asegura que ningún día en este trabajo es igual al anterior.

En Australia, el verano transcurre durante los meses de diciembre, enero y febrero. En esta época del año, por tanto, Campos se encuentra en el invierno australiano, disfrutando de temperaturas suaves. En el estío, sin embargo, la humedad provoca que el calor sea prácticamente insoportable. «Cada vez que estamos en la calle sudamos muchísimo, por lo que vamos mucho a la playa a darnos un baño, a pescar o a hacer surf», asegura el granadino, que admite que sufrió cierto choque cultural la primera Navidad que pasó en pleno verano.

En Australia es necesario utilizar mucha protección para la piel, porque los rayos solares son más fuertes que en España. «Aquí cualquier día de verano si no te pones crema y estás expuesto al sol, te achicharras», explica Juan.

Los picnics en parques son muy habituales entre los australianos, que tienen «pasión por las barbacoas». De hecho, en los espacios verdes es posible encontrar barbacoas eléctricas y gratuitas para el disfrute de los ciudadanos. Tanto en estos picnics como en bares y restaurantes, se consumen muchos platos internacionales, pero la carne de canguro es lo más destacable de la gastronomía australiana. Este exótico plato, sin embargo, no es muy común en la cocina del día a día, según explica el granadino. «Una cosa que a los Australianos les gusta mucho es el Meat Pie. Se trata de una pasta de hojaldre circular, rellena de carne de ternera y salsa muy espesa», explica.

No obstante, Juan Campos echa de menos salir de tapas por Granada. «Juntarme con los amigos de toda la vida, el fresquito de la noche, mis visitas a la Alpujarra… es un estilo de vida muy diferente», dice nostálgico. Aún así, y para saciar esas ganas de España, el granadino ha entrado a formar parte de una asociación de españoles en Brisbane llamada 'Tassca', a través de la cual participa en sesiones de cine para niños, comidas en las que abunda la tortilla de patatas y el salmorejo o los bizcochos al «estilo de la abuela española».

Lo que más impresionó a Juan Campos cuando se mudó a Australia, según relata, fue, en primer lugar, el tamaño gigantesco de los bichos como las arañas y, en segundo, el hecho de que los ciudadanos no se puedan bañar en el río de Brisbane por la presencia de tiburones.