«En España dejamos escapar a la gente que vale, y así nos van las cosas»

–1. ¿Cómo ha sobrevivido al confinamiento?

–Pues he estado tres meses metida en un piso intentando llevarlo lo mejor posible. Me he hecho 8 kilómetros de pasillo todos los días (risas). He intentado no desesperarme más de la cuenta.

–2. ¿Qué proyectos quedaron pendientes?

–Hay varias funciones de 'Los días de la nieve' previstas para primavera que han pasado a octubre o noviembre, y tengo el rodaje de un corto que voy a dirigir precisamente en Jaén con el que ando liada.

–3. ¿2020 está siendo digno de una temporada de 'Cuéntame»?

–Ha sido duro y está siéndolo. Por lo menos para los que nos dedicamos al arte. Yo he tenido que pedir un crédito ICO para poder seguir viviendo, porque las hipotecas están ahí. Veo las plazas de toros llenas y, sin embargo, en los teatros estamos teniendo mogollón de problemas.

–4. Dejó su papel de Nieves en la serie para después volver. ¿Le aburren los proyectos de largo recorrido?

–Si trabajas, no. Mi problema con 'Cuéntame' es que me escribían muy poco. Nunca hemos tenido mal rollo, pero los actores necesitamos actuar. Si salen otras cosas, he tenido que cogerlas.

–5. Con el repaso que se hace de la historia de España, ¿cree que el país anda como los cangrejos?

–España siempre ha sido un poco así. Damos un paso para delante y catorce para atrás. Es un país bastante ingobernable.

–6. ¿Es optimista al menos?

–Con la edad que tengo no (risas). Creo que la forma de ser del español no va a cambiar mucho. De hecho, se ha demostrado con la pandemia. Todo el mundo tenía la ilusión de que nos íbamos a poner las pilas, pero seguimos en la misma dinámica.

–7. Nunca ha renunciado al acento andaluz. Ni ante la cámara ni sobre el escenario. ¿Es su línea roja?

–Uno tiene que reivindicar un poco su esencia. Muchas veces los mismos que escriben los personajes no saben cómo son. Y ahí yo hago de mi capa un sayo. Si no está definido, siempre meto el andaluz, pero una cosa es hablar en andaluz y otra que no se te entienda. Uno tiene que vocalizar.

–8. Tiene una gran vis cómica. ¿Qué enfada a Rosario Pardo?

–Uf. Yo me enfado por un montón de cosas. Como saque el demonio que llevo dentro soy terrible, pero lo saco poco. Pienso que el mundo funciona mejor con humor, aunque sea humor negro.

–9. ¿Le supone un reto el drama?

–Todos los papeles suponen un reto. Incluso te diría que el drama es más fácil. Tengo compañeros estupendos trágicos, pero no les pongas a hacer el gracioso, porque no tienen ni puñetera gracia.

–10. ¿Y cuál es su reto vital?

–Ser un poquito feliz todos los días. Tampoco siempre porque sería muy aburrido. Procuro hacer pequeñas cositas al día para estimularme: leer, escribir, andar, yoga...

–11. ¿Con qué papel se quedaría?

–Todos los personajes te aportan y tú les aportas a ellos. Me ha pasado con Josefina Manresa, sobre todo porque llevo tres años haciéndolo (risas).

–12. Tiene su propia compañía de teatro. ¿Se ha enfrentado a techos de cristal?

–Eso te lo encuentras siempre que eres mujer. Yo no aborrezco a los hombres, pero tengo claro que antes que nosotras van a trabajar los tíos, aunque sean mucho peores. El cambio no va a ser inmediato, llevamos 2.000 años así.

–13. ¿Sueña con la jubilación?

–Sí, pero no me puedo jubilar porque los artistas llevamos fatal lo de las cotizaciones. A veces me gustaría no tener la obligación de levantarme temprano para una serie o poder hacer un poco lo que yo quisiera, pero me quedan 10 años por lo menos.

–14. ¿Dónde se ve entonces?

–Mi marido y yo llevamos tiempo pensando en irnos a Portugal. Es muy tranquilo, me gusta el idioma y además está cerca de España.

–15. ¿Es un culo inquieto? Porque ya ha vivido en varias ciudades…

–Me considero ciudadana del mundo. Soy de Jaén, pero he vivido en muchos sitios y en todos me he sentido a gusto. Tenemos un país que es una prenda, con sitios interesantísimos y un patrimonio que te mueres.

–16. ¿Hay oportunidades fuera de Madrid?

–Creo que sí. Se están haciendo muchas cosas. Lo que pasa es que cuando trabajas desde tu pueblo llega un momento que te encuentras con un tope y quieras que no, en Madrid es donde se mueve todo. Es la referencia.

–17. Ha sido muy crítica con la situación de la profesión. ¿Qué le diría al Gobierno?

–Que se ponga las pilas. Que hubiera una ley de mecenazgo en condiciones, que la gente pudiera desgravar con el dinero que da para el arte y que tuviéramos las condiciones laborales de cualquier trabajador.

–18. Rueda cortos con directores jóvenes. ¿Hay talento?

–Hay muchísimo talento, pero en España dejamos escapar los mejores cerebros, y así nos van las cosas. Fíjate lo que ha pasado con la ciencia. No debemos sorprendernos de que la vacuna no vaya a salir de España, porque toda la gente buena está trabajando fuera.

–19. ¿Cómo ve el cine de su tierra?

–Escaso. Y cuando se hace muy poco no todo es bueno.

–20. Ya van para tres los Goya que se celebran en Andalucía. ¿Qué le parece?

–No soy nada de premios. Están muy bien como reconocimiento, pero uno no puede trabajar para recibir premios, porque no se vive de ellos ni te dan dinero. Te dan una estatua para poner en la estantería y limpiarle el polvo.