La Real Maestranza de Caballería, una de las joyas de Granada

Allí saludé al antecesor de Gonzalo, Ramón Uribe; y a otros miembros de la Corporación fundada en 1686 –ahí es nada–, como Miguel Almansa, marqués de Cadimo; Miguel Afán de Ribera, Manuel Martínez-Carrasco, secretario; Mariana Contreras, comisaria de Clarines; Luis Javier Andrada-Vanderwilde, marqués de Cartagena; Matías Santa Olalla, maestro de ceremonias –buen rato de charla compartimos–; Alfonso Carlos Martínez-Carrasco, archivero; Francisco Santa Olalla, marqués de la Hermida-Clavero; María Pérez de Herrasti, marquesa de Albaida y Cristina Ulloa, duquesa de Arcos y decana de la Diputación de Grandeza.

Dio la bienvenida el teniente de Hermano Mayor, Gonzalo, que recibía al general de Ejército, JEME, Amador Enseñat; a José Manuel de la Esperanza, teniente general jefe del MADOC, y a los generales, de División, Fernando Luis Morón; y de Brigada Carlos Castrillo, Juan Hernández, Martín Zalvide y Andrés Chapa.

Acudieron el subdelegado de Defensa, coronel Federico González-Vico y Francisco Manuel García, coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil; Javier López, subdirector Jefe de Estudios de la Escuela Militar de Helicópteros, ALA-78, y José Luis Rodríguez, jefe de Operaciones de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental.

Del mundo judicial estuvieron Ana Tárrago, fiscal Superior de Andalucía y Rogelio Muñoz, teniente fiscal del TSJA; José Luis López Fuentes, presidente de la Audiencia Provincial de Granada, y de la Audiencia también, Pedro Javier Jiménez, que recientemente ha renunciado a su cargo como fiscal jefe.

Y estaban Enrique Catalina, teniente de alcalde y concejal de Urbanismo; el secretario general de la Delegacion del Gobierno, Jorge Martín; Javier de Teresa, presidente del Consejo Social de la ciudad; y otras muchas caras conocidas –no puedo nombrarles a todos– como la senadora Eva Martín.

Interesantes corros donde se hablaba un poco de todo –incluida la Semana Santa–, como el formado por Juan García Montero, coordinador General de Cultura del ayuntamiento; Ramón Burgos, presidente de la Fundación Andaluza de la Prensa y mi director –volvimos a coincidir–, Quico Chirino, junto al presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva.

Una charla emotiva porque se habló, sobre todo, de temas –créanme– que nada tenían que ver ni con la política ni con lo que la rodea.

Todo un respiro en lo que tuvo mucho que ver el bonito ambiente creado en la Real Maestranza que, por las personas que la conforman y por el edificio que ocupa, son, sin duda auténticas joyas de Granada.