Uno de los detenidos por robar en iglesias y gasolineras de Granada estaba en busca y captura

Así lo ha podido confirmar este periódico por fuentes judiciales, que indican que de los tres familiares, dos han ingresado en prisión. El padre ha sido el único que lo ha hecho por este tema. Uno de sus hijos también, pero no por los robos, sino por contar con una requisitoria por otro asunto. Estaba en busca y captura. El otro hijo ha quedado en libertad.

Las detenciones se efectuaron en el marco de la operación Pecator. Los susodichos son los presuntos autores de dos robos con violencia e intimidación perpetrados en gasolineras de Pulianas y Peligros. Además, se les atribuyen tres robos con fuerza en las iglesias de Jun y de Pulianas, además de otro en un bar de Peligros.

El primero se produjo el pasado día 13 de octubre en una gasolinera del término municipal de Pulianas. La Guardia Civil ha averiguado que el padre entró a cara descubierta en la tienda de la gasolinera, amenazó a la empleada y se apoderó del dinero de la caja registradora. El siguiente tuvo lugar el día 5 de noviembre. Los tres detenidos accedieron a la iglesia de Pulianas, forzaron la puerta de la sacristía y se apoderaron de un televisor.

En esta misma iglesia volvieron a robar quince días después y se apoderaron de las joyas de la Virgen, arrancaron de la pared el buzón de ofrenda con dinero en su interior. Además, también sustrajeron la recaudación del lampadario, un ordenador portátil y una guitarra clásica con su funda.

Los detenidos asaltaron poco después la iglesia de Jun, donde rompieron una reja y una ventana, accedieron al templo y se apoderaron de la televisión que había en el salón que utiliza el párroco para la catequesis y de un sobre que había en la sacristía con 450 euros.

Los dos últimos robos se produjeron en el municipio de Peligros. Asaltaron un bar en el polígono Asegra, donde sustrajeron doce botellas de licor y se apoderaron de la caja registradora, que contenía unos 1.000 euros; y una gasolinera, donde, tras amenazar con una navaja al empleado, se apoderaron del dinero de la caja, unos 350 euros.

Los investigadores de la Guardia Civil de Maracena realizaron las inspecciones oculares en las dos iglesias asaltadas, en las dos gasolineras y en el bar. También visionaron las cámaras de seguridad, tanto las instaladas por los ayuntamientos de estas localidades como las instaladas por los propietarios de los establecimientos, y gracias a los indicios obtenidos consiguieron identificar al cabeza de familia y a los dos hijos.

La Guardia Civil localizó y detuvo al primero, el padre, el pasado sábado. Los hijos fueron detenidos tres días después, el martes por la mañana.