José Callejón: «Jugar en Granada es algo muy especial»

Debe de ser un orgullo que le vuelvan a llamar para ir a la Selección?

Siempre que uno hace bien las cosas en su club y recibe el premio de que te llamen, es un motivo de enorme orgullo. Para mí la felicidad es doble esta vez, porque juego en casa, con mi gente, familia, amigos. Es algo muy especial.

¿Tendrá peticiones como para llenar un fondo de Los Cármenes?

Tengo compromisos como para llenar varios autobuses. Me ha llamado mucha gente, personas a las que quiero, de mi entorno, junto a mis padres o mi hermana. Tengo muchas peticiones y la verdad es que estoy contento por estar tan cerca de donde nací. Voy a tener gente alrededor que me apetece mucho ver. Me encanta.

Usted es un profesional y ha pasado por todo, pero lo del sábado no es tan habitual. Imagino que se le amontonan muchos recuerdos en la cabeza.

Así es. Estoy a pocos kilómetros de mi casa y me pateé todos los campos de la provincia de Granada cuando era pequeño. Aquellas vivencias me traen grandes recuerdos. Mantengo mucha relación con gente que está ahí, entre Motril y la capital. Casi todos mis amigos trabajan en la zona. Es una oportunidad de verles, porque al estar jugando fuera de España, no hay tantas oportunidades de estar juntos. Jugar delante de tu gente es una gran ilusión.

Esto sería lo redondo, que encima Lopetegui le sacara al campo.

Con su entrada, se han abierto nuevas puertas para ciertos jugadores. Que esté aquí es un motivo de alegría. Ojalá todo salga bien el sábado. Que ganemos y nos llevemos los tres puntos tan importantes para la clasificación. Si tengo minutos, bienvenidos sean. Y si no, a seguir trabajando como hasta ahora.

¿Qué le ha comentado sobre su papel en esta etapa?

Está contento con lo que estoy haciendo en Nápoles. Está viendo muchos partidos nuestros. Cuando vine en la anterior convocatoria, me pidió que intentara desempeñar la misma función que allí, que estoy a gran nivel y que intente aprovechar cada oportunidad que surja, en los entrenamientos y en los posibles partidos.

¿Con quién se relaciona más en las concentraciones?

Con todos en general. Conozco a gente con la que he compartido vestuario. Sobre todo tengo una excelente relación con Pepe Reina, que siempre está conmigo. Con Mata coincidí en las categorías inferiores del Madrid. Pero también me llevo bien con los del Barça, con los del Atleti... Es un grupo joven, que viene con muchas ganas y fuerza. En ese aspecto, todo va perfecto.

Parece que los extremos han recuperado protagonismo con el nuevo seleccionador.

Me abre nuevas posibilidades. El míster está contando con gente de banda natural, como Vitolo, Lucas Vázquez, Nolito o yo, que somos gente para actuar por los costados, que estamos abiertos. Esto en principio es bueno para mí.

Su regularidad en Italia es impresionante, en un campeonato muy duro, especialmente para los futbolistas de ataque.

Tanto con Rafa Benítez como ahora con Sarri he tenido mucha continuidad. Han confiado mucho en mí y he adquirido una madurez deportiva importante, con todos los partidos que he estado jugando y la experiencia que he adquirido. Quiero seguir a este nivel, dándolo todo en mi equipo, al igual que cada vez que venga a la Selección.

¿Qué supone ser una celebridad en un sitio como Nápoles, donde sentó cátedra una figura de repercusión mundial e histórica como Diego Armando Maradona?

Nápoles y sus aficionados son la hostia. Te acogen desde el primer momento con mucho cariño. Vestir la camiseta que portó un icono del fútbol es algo único. Allí estuvo Maradona y todavía se palpa. Ganó títulos y se le venera. Yo estoy especialmente a gusto, porque creo que además he conseguido aportar mi mejor juego con el paso de los años.

¿Se echa de menos a Higuaín, que se marchó a la Juve?

La verdad es que marcaba muchos goles y nos sacaba muchas castañas del fuego. Sin él, estamos intentando dar todos un poco más. Los que venimos de atrás intentaremos tapar su hueco aportando goles.

Sigue siendo un gran misterio por qué hay tan pocos jugadores granadinos en la élite.

Creo que durante muchos años se han hecho las cosas bien, pero estoy convencido de que ha habido muchos jugadores que se han merecido llegar y no lo han conseguido por diversos motivos. A veces para llegar al fútbol de élite hay que tener un ápice de suerte. En mi época, en Motril, había gente interesante que podían haber llegado alto y no ha sido así. Es estar en el sitio y momento oportunos. A mucha gente no le ha pasado y es una pena.

¿Qué diferencia hay entre el chaval que despuntaba en el Costa Tropical y se marchó a las categorías inferiores del Madrid y el José Callejón de hoy?

Personalmente soy el mismo. Las circunstancias son las que van cambiando. Tengo dos niñas y una en camino, en dos o tres semanas, así que ya voy por la familia numerosa, y esto sí que se nota. En el fútbol, tengo una continuidad con la que no contaba cuando llegué al primer equipo del Madrid. Llevo tres o cuatro años siempre en el campo, sin prácticamente saltarme partidos, lo cual perfila mejor mi juego. En Italia he aprendido muchísimo sobre táctica, lo cual es fundamental para mantenerte.

Si marca, ¿para quién iría la dedicatoria?

A toda Granada. A mis paisanos, familia, amigos, a mi mujer... A todo el mundo que me aprecia en mi tierra y que seguro que me lo van a reconocer si juego.

Está lejos de España durante la temporada regular y también de su hermano gemelo Juanmi, que sigue en Bolivia.

Es difícil llevar la distancia. Él está lejos. Nos llamamos de cinco a seis veces al día, mediante videollamadas. Yo le despierto a él, él a mí. Nos da igual, lo hacemos a cualquier hora. Intentamos mantenernos con el máximo contacto. Creo que él ha sido la persona más importante de mi vida y gracias a él, a las vivencias que hemos tenido, a cuando jugábamos juntos, estoy aquí, en la Selección, en el Nápoles, disputando la Liga de Campeones. Una parte de todo ello es suya.

¿A qué se dedica José Callejón en Italia, cuando no está liado con el fútbol?

Con las niñas estoy bastante atareado. Intento pasar tiempo con ellas y vamos al zoológico, al parque con los perros. A hacer un poco de vida familiar, para que las niñas no se aburran en casa.

¿Sigue la actualidad del Granada CF desde allí?

Sí, siempre estoy atento. La situación es un poco complicada pero a ver si 'Luquitas' Alcaraz saca esto adelante y lo mantiene otro año en Primera división.

Su relación con Alcaraz es especial. Antes formaba parte del campus de fútbol que organizaba en verano.

Siempre participaba, pero es que además cada verano nos solemos ver por Motril y hablamos mucho de fútbol. Pasamos tiempo juntos. Tenemos una magnífica relación.

¿Para quién será la camiseta con la que dispute el partido?

Supongo que esta vez la guardaré yo, porque será especial, en Granada. La mandaré firmar por todos mis compañeros y se quedará conmigo.

Cuando esto se acabe, ¿cuál será el futuro de José Callejón?

No lo tengo pensado al máximo. Me gustaría dedicarme a algo relacionado con el fútbol, evidentemente. Me agradaría que mi hermano fuera entrenador y que yo fuera su segundo. Alguna vez se lo he comentado: que cuando nos retiremos tiene que ser al revés. Él como entrenador, la cara visible, y yo de mano derecha, por detrás, siempre con los chavales.