La grúa retira la 'V' del tronco, recién cortada. RAMÓN L. PÉREZ

La cuesta del Pino pierde su árbol centenario

Cortan el ejemplar, situado en una propiedad privada, entre críticas de varios vecinos que trataron de detener la tala

Javier Morales

Granada

Martes, 20 de octubre 2020, 00:41

La Cuesta del Pino ya no tiene árbol que le dé nombre. El ejemplar que motivó su denominación acabó ayer troceado, ante la mirada empañada ... de algunos vecinos que se despertaron con la tala de un símbolo centenario del barrio y trataron de frenarla. Sin embargo la operación, en un espacio privado, tenía el visto bueno del Ayuntamiento. Por la tarde la conífera ya había quedado reducida a un montón de leña y serrín.

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Los operarios de la grúa y el encargado de cortar el grueso tronco del pino que corona la cuesta, paralela a la Carretera de la Sierra, llegaron pasadas las nueve de la mañana. El ejemplar, insistían los vecinos, estaba «completamente sano», de ahí la sorpresa cuando escucharon el crujido de una motosierra que empezó a segar las ramas verdes del pino. Aseguran que se trata de un ser vivo centenario. Según el testimonio de algunos residentes, aparece en dibujos de hace dos siglos. Rondaba los 40 metros de altura.

Algunos vecinos se llevaron troncos del árbol como recuerdo. RAMÓN L. PÉREZ

Los vecinos se impacientaban a medida que las ramas empezaron a caer: se pusieron en marcha para impedir que el guardián del barrio, visible desde la Carretera de la Sierra y la subida hacia el cementerio, cayera por completo. Incluso hablaron con expertos para preguntar hasta qué altura podían cortar manteniendo con vida el árbol.

Terminaron por llamar a la Policía Local ante la sospecha de que el vegetal tuviera algún tipo de protección. Dos agentes se presentaron en la Cuesta del Pino, vieron que la tala estaba en marcha y contactaron con el Ayuntamiento para corroborar que todo estaba en orden. Así es. Según fuentes municipales, el árbol estaba plantado en una zona no protegida dentro de un terreno privado. Tampoco aparece listado en el catálogo de árboles singulares de la Junta de Andalucía. Es decir, no tenía –a priori– ningún escudo legal.

Así que la tala contó con el visto bueno de Urbanismo, lo que no quiere decir que fuese el Ayuntamiento quien la pidió y ejecutó. La comunidad de propietarios acordó por unanimidad retirar el pino, que ocasionaba perjuicios a las viviendas, y lo comunicó el 3 de septiembre al Ayuntamiento mediante una declaración responsable. IDEALtrató de hablar con los inquilinos de la casa más cercana al ejemplar, pero no quisieron explicar el porqué del corte.

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Vista del árbol en una imagen tomada en 2017. RAMÓN L. PÉREZ

Así que, tras un descanso a media mañana, los operarios de la grúa siguieron con su tarea. Ya había cerca de una decena de vecinos apostados frente al árbol y sus restos, mientras el brazo mecánico elevaba al encargado de la motosierra para seguir con la tarea. A pie de calle, otro trabajador cortaba las ramas y el tronco con el tamaño suficiente para que entrasen en la cubeta del camión.

Cuesta sin pino

Los vecinos siguieron buscando alternativas. Aseguraron que la grúa no tenía permiso de ocupación de la vía pública –no afectaba al tránsito de vehículos, pero sí al de personas– y que no era suficiente una licencia de obra menor. Avisaron de ello al objeto de dilatar la caída total del pino. Tenían marcado un objetivo: evitar que cortasen la 'V' que dos ramas formaban en la parte superior del tronco, punto a partir del cuál el árbol se podría considerar ya muerto.

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Ninguna de las llamadas surtió efecto. Hacia las tres, la grúa ya había cargado con el pesado segmento en 'V' y los vecinos empezaron a retirarse hacia sus casas. Algunas, con lágrimas en los ojos. Otros pidieron a los trabajadores maderos del icónico tronco y los cargaron –entre varios– para llevarlos a casa como recuerdo. Hubo quien guardó piñas y ramas para tratar de hacer vida del árbol caído; quizá arraigue en sus jardines. Al final, del ejemplar sólo queda la denominación oficial de la calle. Por la tarde, alguien colocó un cartel con sorna: «Cuesta sin pino».

El cartel colocado por la tarde. IDEAL

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