Descubren dos nuevas especies marinas en Castell de Ferro tras años de investigación
Los científicos confirman la existencia de corales 'Parazoanthus franciscae' y 'Parazoanthus brevitentacularis', resaltando la riqueza biológica de la zona
Un equipo de investigadores de la Universidad de Granada y la Fundación Museo del Mar de Ceuta ha descubierto dos nuevas especies de corales en ... el litoral de Castell de Ferro, dentro del marco del proyecto MESO Alborán 2.
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Las nuevas especies, 'Parazoanthus franciscae' y 'Parazoanthus brevitentacularis', han sido identificadas tras un «exhaustivo» estudio en el que se realizó trabajo de campo, análisis genético de última generación y la colaboración de expertos en biología marina. Ambas especies pertenecen al género 'Parazoanthus', que son conocidos como 'anémonas incrustantes amarillas', organismos coloniales que desempeñan un papel crucial en la creación de hábitats submarinos.
El descubrimiento se realizó en la zona de especial protección de los Acantilados y Fondos Marinos de Calahonda y Castell de Ferro, un área, que según los científicos, tiene un alto valor ecológico. Según Alfredo Rosales Ruíz, coordinador científico de la Fundación Museo del Mar de Ceuta, este hallazgo refuerza la idea de que el Mar de Alborán aún esconde muchas sorpresas: «el Mar de Alborán, en el extremo occidental del Mediterráneo, sigue revelando especies que no habían sido descritas hasta ahora. Estos corales, además de ser testigos vivientes de la evolución marina, desempeñan un papel clave en los ecosistemas marinos, sirviendo de refugio y alimento para otras especies.»
El proceso de identificación de las especies se inició antes de la pandemia del COVID-19, cuando los biólogos marinos observaron diferencias morfológicas en colonias de corales blandos. Para confirmar sus sospechas, se incorporó al estudio el equipo de genética del Grupo BIO200 de la Universidad de Granada, coordinado por Carmelo Ruiz Rejón, que mediante análisis genómicos pudo verificar que se trataba de especies diferentes.
Julio de la Rosa Álamos, director del Aula del Mar de la Universidad de Granada, destacó la importancia de este descubrimiento para la ciencia y la conservación marina: «este hallazgo pone en evidencia la gran biodiversidad de nuestras costas y la necesidad de seguir investigando y protegiendo estos ecosistemas. En una franja de apenas 65 kilómetros, el litoral de Granada alberga cuatro zonas de especial conservación, lo que es excepcional en el contexto mediterráneo.»
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Según los científicos, para el estudio se han empleado las últimas tecnologías en exploración marina como vehículos conducidos a control remoto (ROV), que permitieron realizar prospecciones en las profundidades antes de la inmersión de los especialistas en buceo científico.
Además de su importancia ecológica, los corales 'Parazoanthus' son objeto de estudios por su capacidad para generar compuestos antimicrobianos con potenciales aplicaciones biomédicas. Los investigadores destacan su papel en la producción de sustancias que podrían ser utilizadas en la lucha contra infecciones bacterianas.
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Por otro lado, estudios genéticos han revelado que el género 'Parazoanthus' ha estado presente en la Tierra desde hace 250 millones de años, sobreviviendo incluso a la gran extinción del Pérmico-Triásico.
Máxima colaboración
El hallazgo ha sido posible gracias a la colaboración público-privada, que ha permitido el desarrollo de estudios avanzados en biodiversidad marina. El proyecto fue impulsado inicialmente con financiación del Campus de Excelencia Internacional del Mar (CEI·MAR), con el apoyo de la empresa Gestema Sur y la Fundación Museo del Mar de Ceuta, en coordinación con la Universidad de Granada.
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Por su parte, el proyecto 'MESO Alborán 2' se ha desarrollado gracias a la colaboración de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, dentro del 'Programa Pleamar' y con la cofinanciación del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura (FEMPA).
El sector pesquero también ha jugado un papel importante en este hallazgo. Inma Carrasco, en representación de la Cofradía de Pescadores de Motril, expresó su satisfacción por el descubrimiento y la importancia de conservar el ecosistema marino: «bienvenidas sean estas nuevas especies. Ojalá sigamos descubriendo más y, sobre todo, que no desaparezcan las que ya tenemos. La Cofradía de Motril estará siempre dispuesta a colaborar en lo que sea necesario para proteger nuestro mar.»
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Por su parte, la alcaldesa de Gualchos-Castell de Ferro, Toñi Antequera, destacó el orgullo que supone para la localidad haber sido el escenario de esta novedad marina: «es un honor que nuestro municipio haya sido elegido para la presentación de estas nuevas especies. Esto demuestra la riqueza natural de nuestro entorno y la importancia de su conservación.»
Las nuevas especies en la costa granadina refuerzan la necesidad de seguir investigando, protegiendo y difundiendo la riqueza del Mar de Alborán, concluyen los investigadores.
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