El PSOE pide el cese de la exalcaldesa de Motril

La secretaria de Organización del PSOE granadino, Elvira Ramón, ha considerado que el presidente del PP de Granada, Sebastián Pérez, tiene una "excelente oportunidad" para aplicar la línea roja de las dimisiones que "tanto le gusta exigir" al resto de partidos.

Ramón ha hecho estas consideraciones después de que la Audiencia de Granada haya admitido el recurso presentado por el exgerente de la empresa pública de vivienda de la Diputación de Granada -Visogsa-, el socialista José Luis Hernández.

La secretaria de Organización del PSOE ha apuntado que García Chamorro tendrá que sentarse en el banquillo de los acusados por los presuntos delitos de injurias y calumnias contra Hernández, al que acusó de viajar en primera clase a diferentes destinos con cargo a la empresa pública y de disfrutar de un contrato blindado.

La socialista ha pedido al presidente del PP provincial que abandone su silencio y adopte las medidas oportunas para que la actual concejal y diputada provincial "no siga un minuto más" en sus cargos y ha calificado como "grave" que se utilice la difamación "como herramienta política para atacar a representantes públicos".

Ramón ha detallado que Hernández desarrolló una gestión "fuera de toda duda" y ha reprochado a Pérez que presuma de "ética política y luego permita que una persona de su máxima confianza siga en primera línea política".

Ha destacado la necesidad de que el presidente del PP dé la cara porque en caso contrario, además de incurrir en una fuerte contradicción, perdería toda la autoridad moral y legitimidad para dar lecciones de ética dentro y fuera de su propio partido.

La secretaria de Organización socialista ha subrayado que el PSOE respeta la presunción de inocencia, pero le ha recordado al responsable del PP provincial, "que tanto dispara a ciegas contra los demás", que "debe predicar con hechos".

La Audiencia se ha pronunciado por tercera vez sobre la causa y ha aceptado el recurso de Hernández, al que García Chamorro atribuyó la comisión de supuestas irregularidades sin contrastar cuando él estaba al frente de Visogsa, unas consideraciones que podrían representa un delito de injurias y calumnias y no una falta como apuntó el Juzgado de Instrucción 6 de Granada.